11 de diciembre de 2015
El Rey defiende «el periodismo libre como antídoto contra el abuso del poder»
El Rey defiende «el periodismo libre como antídoto
contra el abuso del poder»
Don Felipe y Doña
Letizia presidieron anoche la Cena de los Cavia
N.B. En el "Antiguo Régimen" era función de los bufones, que cuando eran más impetinentes de lo permitido recibían unas bastonadas muy merecidas. Hoy en día el Estado de Derecho legisla minuciosamente, pero ineficazmente, esas "bastonadas".
ALMUDENA MARTÍNEZ-FORNÉSMadrid - 10/12/2015 a las 23:12:10h. -
Act. a las 13:02:08h.
«El periodismo
libre, riguroso y de calidad es antídoto contra el uso demagógico o
perverso de la información, así como contra el abuso del poder o de quien
pretenda sojuzgar derechos y libertades». «Efectivamente, la libertad de
información y de opinión, ejercida desde el respeto y la responsabilidad, no
admite condiciones ni acotaciones». Así lo afirmó anoche el Rey en la Casa de
ABC, donde presidió junto con la Reina la tradicional Cena de los Cavia, en la
que se entregan los premios con más solera -95 años ya- y prestigio del
periodismo en español, que patrocina Ferrovial.
Y es que la cena se convirtió también
en un homenaje a la libertad de prensa como contrapeso a los abusos de
cualquier poder. Uno de los galardonados, el premio Luca de Tena, era el editor
del diario «El Nacional», de Caracas,Miguel Henrique
Otero, la última voz
de la prensa libre en la Venezuela chavista que ahora empieza a derrumbarse.
Además, entre los invitados estaba Leopoldo López Gil, padre del opositor
venezolano que sigue encarcelado en Caracas por pensar diferente. A él, a todos
los demás presos políticos (Antonio Ledezma, Daniel Ceballos, Manuel
Rosales...) y a los valientes estudiantes que perdieron la vida, Otero les
dedicó su premio.
Salvoconducto
a la libertad
«Vivimos con especial cercanía la
actualidad de países hermanos comoVenezuela»,
afirmó el Rey, quien describió al editor venezolano como «un matemático que ha
hecho de su vocación periodística un salvoconducto hacia la libertad, la
democracia y la justicia -los tres pilares que sostienen un Estado de Derecho-,
así como la autoestima de las personas, la paz social y el bienestar de un
pueblo».
Nada
más recibir el premio, Otero afirmó que «los demócratas venezolanos tenemos una
deuda moral con el diario ABC» y recordó que «en el tiempo de exilio al que
hemos sido condenados decenas y decenas de profesionales de la comunicación,
ABC se ha constituido en una referencia. Diré más -agregó-, en una estructura
de comunicación que ha asumido la causa democrática venezolana como una
significativa batalla».
«Saber que ABC seguirá siendo una de las más potentes voces
editoriales de Europa es
para nosotros un aliento, una corriente de energía que nos estimula a seguir
adelante», añadió.
Don
Felipe también entregó el premio Mariano de Cavia al periodista Carlos Herrera,
«el periodista de todos -dijo-. El de la distendida cotidianidad a pie de
calle. Un comunicador valiente, espontáneo y optimista, con bastantes más
"fósforos" que complejos».
Cuando Herrera recogió el galardón
auguró que España, «la tierra en la que hemos nacido y crecido, será en el
futuro mucho mejor de lo que es hoy y fue ayer», «independientemente de la
densidad de cenizos por metro cuadrado que acompañan nuestro tránsito»,
apostilló. Y ofreció varias razones, entre ellas, «la calidad de las nuevas
generaciones (mejor
de lo que sospechan muchos) y la indudable inquietud creativa de su
ciudadanía». Según Herrera, «los inexplicables muros que nos han separado
históricamente de la modernidad van cayendo uno a uno hasta el punto de que se
nos está poniendo una cara de vanguardia europea que echa "pa tras".
En ese sentido, Señor, como en otros, lo estáis bordando», dijo a Don Felipe.
El Rey también entregó el premio
Mingote a Javier
Barcáiztegui («Barca»). «Sus viñetas en la revista
“Trofeo” -dijo- aúnan el arte y la afición cinegética practicada en sintonía
con los ciclos de la Naturaleza. Gusto, fino humor, tradición y ocio,
compactados en un dibujante».
En sus palabras de agradecimiento, Barcáiztegui recordó a Antonio
Mingote, que «no era cazador pero sí un apasionado defensor de
la naturaleza y singularmente de los árboles», y subrayó que a él mismo, «como
a todo cazador que se precie, me apasiona el campo y me interesa enormemente su
entorno, muchas veces desde la perspectiva del humor y la sátira». Además,
reconoció que «casi todas las situaciones grotescas que crea mi imaginación son
fruto de mis propias experiencias».
Donde
siempre hemos estado
Como
es habitual en los Cavia, la presidenta-editora de ABC, Catalina Luca de Tena,
dirigió unas palabras en las que reiteró ante los Reyes «la permanencia de los
valores que nuestro periódico viene defendiendo desde su fundación, hace ya más
de un siglo». «ABC sigue donde estaba, con sus páginas abiertas de par en par a
cualquier tiempo nuevo, pero con su lomo grapado a unos principios que han
pretendido ser su mejor contribución a España. Sin ningún tipo de servidumbre,
ni tampoco otra atadura que la de nuestros lectores. Así que, Majestades, aquí
nos tienen, donde siempre hemos estado», afirmó.
A
su llegada, los Reyes fueron recibidos a pie de coche por Catalina Luca de
Tena; el presidente de Vocento, Santiago Bergareche, y el director de ABC,
Bieito Rubido. Después, en el interior del edificio, les aguardaban las
autoridades: el presidente de honor de Vocento, Santiago de Ybarra; el
consejero delegado de Vocento, Luis Enríquez; el presidente de Ferrovial,
Rafael del Pino; el presidente del jurado, Darío Villanueva, y los tres
premiados.
Entre las autoridades, estaban
presentes el presidente del Tribunal Constitucional, Francisco Pérez de los
Cobos; la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y los
ministros de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, y de
Agricultura, Isabel García Tejerina. El resto de los invitados, procedentes del
mundo de la cultura, la política, la
empresa y el periodismo, aguardaban en el salón del patio
andaluz de la Casa de ABC.
Don Felipe clausuró con sus palabras
la entrega de los premios y, una vez finalizada la cena, Catalina Luca de Tena
cerró el acto de la misma forma que solía hacer su padre, don Guillermo, con el
tradicional brindis: «¡Por el Rey!».
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario