30 de julio de 2014
Rajoy y Mas discrepan sobre la consulta pero mantienen abierta la negociación
el pais - MIQUEL NOGUER / ANABEL DÍEZ Madrid 30 JUL 2014 - 14:58 CEST349
Dos horas y media de reunión han terminado “sin un portazo”. Esta es la impresión que transmiten desde el palacio de la Moncloa tras el encuentro entre Mariano Rajoy y Artur Mas. El desacuerdo como era evidente se ha reafirmado en la negativa de Rajoy de admitir una consulta soberanista, pero sí hay espacio para el diálogo en otras materias sobre todo en el plano económico. Artur Mas le ha entregado un documento con materias de infraestructuras que el Estado debe impulsar. Rajoy ha quedado en estudiarlo y darle respuesta.
El presidente de la Generalitat ha comparecido poco después en el Centro Cultural Blanquerna, delegación del Gobierno catalán en Madrid, para dejar claro que durante la cita se ha respirado “un clima de diálogo abierto”. “Hoy no era el final de nada, y por sí mismo es bastante positivo”, ha afirmado Mas. “Hemos hablado de otros 23 temas que no son la consulta: la economía, las finanzas de Cataluña, dependencia…”, ha agregado. Sobre el derecho a decidir, el presidente de la Generalitat ha reiterado su mensaje: “Tenemos la base social y política, y lo queremos hacer legalmente”. El presidente de la Generalitat ha subrayado también que el presidente del Gobierno no le ha dado una alternativa a la votación de noviembre. Una persona ha intentado irrumpir en la sala al grito de “¡viva España!”, aunque la policía se lo ha impedido.
“Tenemos la determinación y tenemos el pacto político, pero nos gustaría hacerlo de forma legal y de acuerdo con el Estado, a la británica. Este es nuestro deseo. Esto no puede ser aún pero seguiremos intentándolo. Este acuerdo no lo tenemos aunque el clima de diálogo está abierto”, ha añadido Artur Mas. Con respecto a las otras cuestiones, “de muy diversa índole y en los cuales podría haber algún tipo de acuerdo”, Mas ha destacado por ejemplo la inversión en infraestructuras: “Hemos hablado de infraestructuras. Madrid tiene deberes pendientes en Cataluña. Hemos hablado de recentralización y de las competencias del Estado”.
Tras casi un año sin entrevistarse, Mariano Rajoy y Artur Mas se han reunido este miércoles en el Palacio de la Moncloa durante prácticamente dos horas y media. Es la primera vez que lo hacen desde que el presidente catalán convocara la consulta independentista, que Rajoy considera ilegal. Dos acontecimientos han marcado este encuentro: el escándalo de corrupción que envuelve al “padre político” de Mas, Jordi Pujol y que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, ya dejó claro su rechazo a un eventual referéndum.
La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, ha asegurado que Rajoy ha trasladado a Mas la prioridad de la recuperación económica y que la consulta no es legal y no se va a realizar. Sánchez-Camacho ha convocado una rueda de prensa urgente para explicar el mensaje de Rajoy a Mas, en el que se ha comprometido a resolver "los verdaderos problemas de los catalanes", como crear empleo y garantizar los servicio públicos.
El encuentro entre ambos presidentes se ha producido en un momento delicado para Convergència Democràtica de Catalunya, tras la confesión de su fundador, Jordi Pujol, de que durante 34 años ocultó la fortuna familiar en paraísos fiscales. Un escándalo que ha llevado alexpresident a renunciar a sus derechos como ex presidente de la Generalitat y ante el que Mas ha recalcado que no cambiará la hoja de ruta del soberanismo.
Se trata de la primera reunión pública entre Rajoy y Mas desde finales de agosto de 2013, cuando se celebró en La Moncloa una cita discreta, que se hizo pública sólo después de realizarse. Pocos meses más tarde, Mas anunció la fecha y la pregunta de la consulta. Rajoy se enteró a través de los medios de comunicación.
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