Los barones del PSOE cierran filas tras la victoria de Pedro Sánchez en las primarias
Fernández Vara pide al nuevo secretario general que haga “su” Ejecutiva y que sea “integradora”
EL PAÍS / AGENCIAS Madrid 14 JUL 2014 - 14:01 CET4
Fernández Vara vota el domingo en las primarias del PSOE. / EFE
El PSOE se ha levantado este lunes con la resaca de una jornada electoral que terminó anoche con la victoria de Pedro Sánchez, próximo secretario general del partido. Mientras el nuevo líder socialista trabaja ya en la confección de la nueva cúpula, los líderes regionales han aprovechado sus intervenciones públicas para valorar los resultados del domingo. Guillermo Fernández Vara, secretario general del PSOE de Extremadura, ha sido de los primeros en resaltar la "enorme fuerza" con la que aterriza Sánchez en la dirección. "Consecuencia de la altísima participación que ha habido", ha remachado el barón regional, antes de pedir al nuevo máximo representante de la formación que "haga su ejecutiva: Integradora, pero su ejecutiva".
"Ayer, cada uno de los militantes tenía su candidato. Hoy, los 200.000 afiliados tienen su secretario general", ha aseverado Vara, que ha defendido que la nueva cúpula del partido se conforme por áreas temáticas, como Economía, Educación o Sanidad. "Y, en la medida en que eso sea incompatible con las cuotas territoriales, pues tengan más peso lo primero que lo segundo", ha recalcado el socialista extremeño.
Extremadura se presentó este domingo, precisamente, como uno de las autonomías que Pedro Sánchez no consiguió conquistar. Allí, al igual que en Asturias, ganó Madina. El presidente de esa comunidad, Javier Fernández, también ha querido valorar este lunes las consecuencias de las primarias. Ha insistido en el carácter "abierto y legitimador" de las elecciones. "Los españoles ya perciben con claridad que los socialistas no elegimos a nuestro secretario general alrededor de una mesa camilla", ha subrayado Fernández, que ha pedido "que, una vez que hemos sido capaces de cambiar el partido, ahora tenemos que ser capaces es de cambiar las políticas".
El presidente ha destacado que en Asturias no hubo ninguna "injerencia" de la dirección. "Ahora, detrás de Sanchez solo debería haber secretarios generales capaces de apoyarles. Eso es lo que voy a hacer yo", ha comentado, antes de añadir que las primarias de noviembre son un "compromiso" del PSOE. "Y supongo que el partido cumple sus compromisos".
Mucho más efusivos se han mostrado los secretarios generales de la Comunidad Valenciana, Madrid y Castilla La Mancha: Ximo Puig, Tomás Gómez y Emiliano García-Page, respectivamente. En este orden, los tres han destacado su "satisfacción y alegría por la victoria de Sánchez. "Estoy muy contento. Primero, porque ha sido un proceso democrático ejemplar. Y, segundo, porque se abre un nuevo tiempo de cambio y unidad", sentenció el líder madrileño.
A esa línea se ha sumado también García-Page: esta elección será "importante" para el país, ya que "le viene bien que la política se recupere y haya más renovación". "El PSOE volverá a ser muy central en las grandes decisiones y con el corazón a la izquierda", ha subrayado. "Los míos han ganado en todos los sitios", ha bromeado, por su parte, Ximo Puig, que se ha mostrado convencido de que los socialistas valencianos estarán en la nueva dirección encabezada por Pedro Sánchez.
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