La Reina anula un viaje a Londres ante los roces con Gibraltar
El Gobierno decide suspender la visita ante el conflicto pesquero con Gibraltar y la visita del príncipe Eduardo al Peñón
La reina Sofía no viajará el viernes a Londres, donde iba a asistir a los actos del Jubileo de diamantes de la reina Isabel II, que celebra sus 60 años en el trono. La Casa del Rey ha informado de que el desplazamiento ha sido suspendido porque el Gobierno ha considerado "poco adecuado en las actuales circunstancias".
Con esta afirmación, según fuentes gubernamentales, se pone de manifiesto las tensiones entre el Gobierno Español y el Reino Unido por la visita del príncipe Eduardo, hijo menor de la reina Isabel, y su esposa al Peñón, dentro de la gira que varios miembros de la casa real británica están realizando por las colonias. A ello se suman los roces entre las autoridades gibraltareñas y la flota pesquera española con base en la provincia de Cádiz, a la que se le está impidiendo faenar en las aguas que circundan el Peñón. Tampoco ha gustado conocer que la banda oficial de Gibraltar iba a tocar en los actos programados para el Jubileo.
El ministro español de Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, dijo hoy que la cancelación del viaje de la reina Sofía a Londres muestra la "extraordinaria sensibilidad" de la Casa Real "para con todo problema que afecte a la nación española". García-Margallo, quien está de visita oficial en Brasil, dijo en rueda de prensa que fue informado en este país sobre esa decisión, que según explicó, es "consecuencia de algunas dificultades que son eternas en torno a las relaciones alrededor del Peñón de Gibraltar, que pasan por [momentos] altos y bajos".
Según el ministro español, "probablemente ahora estuviésemos en un momento bajo, no excesivamente bajo", y la Casa Real consideró que el viaje de la Reina Sofía a Londres no sería oportuno.
No es la primera vez que sucede un conflicto de esta naturaleza. Cuando los príncipes de Gales, Carlos y Diana, viajaron a Gibraltar con motivo de su luna de miel, este hecho causó malestar en el Gobierno español y tuvo consecuencias en las relaciones entre las dos casas reales. El pasado día 8 de mayo, tras ser anunciada la visita que el hijo menor de la reina Isabel II hará al Peñón de Gibraltar el próximo mes de junio, el Ministerio español de Asuntos Exteriores convocó al embajador británico para trasladarle su "disgusto y malestar" por ese viaje.
La Casa del Rey había confirmado hace un mes la presencia de los Reyes en el almuerzo que el viernes ofrecerá Isabel II en el castillo de Windsor y a la posterior cena que en el palacio de Buckingham iba a celebrar el príncipe Carlos a los invitados de su madre. Los actos centrales del jubileo se celebrarán entre el 2 y el 5 de junio.
Posteriormente, tras el accidente que sufrió don Juan Carlos I cuando cazaba elefantes en Botsuana, el pasado 13 de abril, la Casa del Rey decidió que la representación de la familia real la ostentara doña Sofía, que iba a asistir al almuerzo de Windsor. Los Reyes de España son primos de la reina Isabel. A los actos del Jubileo asistirán representantes de todas las casas reales del mundo a excepción de la española.
El Palacio de Buckingham, residencia oficial de Isabel II, no hará comentarios sobre la cancelación de la visita prevista para este viernes de la reina Sofía de España debido a diferencias sobre Gibraltar, dijo hoy a Efe un portavoz.
En días pasados un portavoz del Foreign Office dijo a Efe que, como ya se había anunciado, "miembros de la familia real viajarán fuera del Reino Unido en representación de la Reina durante el año de su Jubileo de Diamantes".
Se prevé que los miembros de la realeza británica "visiten cada reino, así como los países de la Commonwealth, dependencias de la Corona y territorios británicos en el extranjero", agregó el portavoz oficial del Reino Unido.
El Gobierno británico rechaza una negociación sobre la soberanía del Peñón a menos que lo reclamen los gibraltareños, mientras el Gobierno español ha pedido recuperar el Proceso de Bruselas, por el que España y el Reino Unido se comprometieron en 1984 a negociar el dominio de la colonia.
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