21 de enero de 2010
Monseñor Algora sobre la TV: '¡Que la detengan... Es una mentirosa!'
Comunicación | elmundo.es
Líder mundial en español
Jueves 21/01/2010. Actualizado 14:36h.
Edición España
RELIGIÓN | Cree que las series manipulan la conciencia de los niños
Monseñor Algora sobre la TV: '¡Que la detengan... Es una mentirosa!'
Antonio Algora (izqda.), en una rueda de prensa de la Conferencia Episcopal. (Foto: Efe)
José Manuel Vidal | Madrid
"¡Que la detengan... Es una mentirosa, malvada y peligrosa!". La popular canción de David Civera en los labios y en el título de la pastoral de un obispo. Monseñor Antonio Algora se sube al carro del cantante de Teruel y utiliza su letra pegadiza para denunciar y acusar de manipular la conciencia de los niños a "la nueva programación de Televisión Española" en general y a las "series y fotonovelas" de todos los canales en particular.
En su pastoral, el prelado manchego denuncia, primero, la actual tendencia de la "presión mediática y de la cultura bufa", que "insiste en que la Iglesia le 'come el coco' a los niños en la catequesis, o cuando no, y con cierta frecuencia, se abren los telediarios, como si fueran noticia de hoy, abusos cometidos por eclesiásticos en el pasado en América o Irlanda".
En segundo lugar, concreta más su denuncia en la televisión. Y se vale para ello de la canción "pegajosa" de "mi ya viejo conocido de Teruel en sus comienzos de cantante", David Civera, que es la que le viene a la mente al obispo, "al ver la trayectoria anterior y los derroteros con los que ha comenzado su nueva programación Televisión Española".
Consciente del "amor desgarrado que profesamos los españoles a la TV en general", el obispo añade en su escrito esta nueva estrofa de la canción, "maldita sea la noche en la que la conocí, ahora vivo atrapado, esa mujer no me deja vivir...", para acusar a la tele de manipular las conciencias infantiles.
"Lo cierto es que no hay derecho a la manipulación que se está haciendo de los niños y niñas de nuestra sociedad con series y fotonovelas realizadas con los mejores niveles de calidad cinematográfica y que, por lo que sé, enganchan a padres e hijos educándolos en los peores sentimientos: en el rencor, en la venganza, o en la temprana aventura amorosa...".
Tras volver a repetir "¡que la detengan!", monseñor Algora se cura en salud y dice: "No, no estoy tratando de promover una campaña contra nadie". Pero, a renglón seguido, asegura que la Iglesia dispone de "los mejores elementos para parar los pies a esa pretendida cultura invasora de la intimidad de la persona a tan tempranas edades".
Los chicos de la Iglesia, 'distintos'
Se refiere, en concreto, al 'Día de la Infancia Misionera con el lema: 'Con los niños de África... encontramos a Jesús'. El pasado encuentro diocesano, con centenares de niños y niñas de toda la provincia, sirvió para que ellos se dijeran unos a otros lo que estaba pasando en el mundo con la Infancia y manejaron cifras: 250.000 niños que mueren de hambre todas las semanas; 300.000, enrolados como soldados en las distintas guerras; 300 millones de niños que trabajan como esclavos...".
En esos encuentros de los niños católicos "los sentimientos que surgen en nuestros chavales y chavalas son los de la solidaridad y la necesidad de encontrarse con Jesús" y de "tratar a los niños marginados, de lejos y de cerca, como algo nuestro, a llamarlos hermanos".
Y esa dinámica, según el prelado, "hace a nuestros niños mejores, menos caprichosos, más austeros y alegres, pensando que, con Jesús, a sus tempranas edades ya pueden amar con absoluta gratuidad y esto es lo que, sabemos, ennoblece realmente a la persona".
Y monseñor Algora extrae una clara conclusión. "A lo mejor vivo con demasiada pasión de pastor esta riqueza de nuestra sociedad que son los chicos y chicas que forman parte de nuestra Iglesia. Pero creo que no, es que ciertamente son distintos de lo que nos venden en la TV como buenos modelos. Al menos en todo lo que se refiere a egoísmo, violencia y odio: ¡Que la detengan!".
Líder mundial en español
Jueves 21/01/2010. Actualizado 14:36h.
Edición España
RELIGIÓN | Cree que las series manipulan la conciencia de los niños
Monseñor Algora sobre la TV: '¡Que la detengan... Es una mentirosa!'
Antonio Algora (izqda.), en una rueda de prensa de la Conferencia Episcopal. (Foto: Efe)
José Manuel Vidal | Madrid
"¡Que la detengan... Es una mentirosa, malvada y peligrosa!". La popular canción de David Civera en los labios y en el título de la pastoral de un obispo. Monseñor Antonio Algora se sube al carro del cantante de Teruel y utiliza su letra pegadiza para denunciar y acusar de manipular la conciencia de los niños a "la nueva programación de Televisión Española" en general y a las "series y fotonovelas" de todos los canales en particular.
En su pastoral, el prelado manchego denuncia, primero, la actual tendencia de la "presión mediática y de la cultura bufa", que "insiste en que la Iglesia le 'come el coco' a los niños en la catequesis, o cuando no, y con cierta frecuencia, se abren los telediarios, como si fueran noticia de hoy, abusos cometidos por eclesiásticos en el pasado en América o Irlanda".
En segundo lugar, concreta más su denuncia en la televisión. Y se vale para ello de la canción "pegajosa" de "mi ya viejo conocido de Teruel en sus comienzos de cantante", David Civera, que es la que le viene a la mente al obispo, "al ver la trayectoria anterior y los derroteros con los que ha comenzado su nueva programación Televisión Española".
Consciente del "amor desgarrado que profesamos los españoles a la TV en general", el obispo añade en su escrito esta nueva estrofa de la canción, "maldita sea la noche en la que la conocí, ahora vivo atrapado, esa mujer no me deja vivir...", para acusar a la tele de manipular las conciencias infantiles.
"Lo cierto es que no hay derecho a la manipulación que se está haciendo de los niños y niñas de nuestra sociedad con series y fotonovelas realizadas con los mejores niveles de calidad cinematográfica y que, por lo que sé, enganchan a padres e hijos educándolos en los peores sentimientos: en el rencor, en la venganza, o en la temprana aventura amorosa...".
Tras volver a repetir "¡que la detengan!", monseñor Algora se cura en salud y dice: "No, no estoy tratando de promover una campaña contra nadie". Pero, a renglón seguido, asegura que la Iglesia dispone de "los mejores elementos para parar los pies a esa pretendida cultura invasora de la intimidad de la persona a tan tempranas edades".
Los chicos de la Iglesia, 'distintos'
Se refiere, en concreto, al 'Día de la Infancia Misionera con el lema: 'Con los niños de África... encontramos a Jesús'. El pasado encuentro diocesano, con centenares de niños y niñas de toda la provincia, sirvió para que ellos se dijeran unos a otros lo que estaba pasando en el mundo con la Infancia y manejaron cifras: 250.000 niños que mueren de hambre todas las semanas; 300.000, enrolados como soldados en las distintas guerras; 300 millones de niños que trabajan como esclavos...".
En esos encuentros de los niños católicos "los sentimientos que surgen en nuestros chavales y chavalas son los de la solidaridad y la necesidad de encontrarse con Jesús" y de "tratar a los niños marginados, de lejos y de cerca, como algo nuestro, a llamarlos hermanos".
Y esa dinámica, según el prelado, "hace a nuestros niños mejores, menos caprichosos, más austeros y alegres, pensando que, con Jesús, a sus tempranas edades ya pueden amar con absoluta gratuidad y esto es lo que, sabemos, ennoblece realmente a la persona".
Y monseñor Algora extrae una clara conclusión. "A lo mejor vivo con demasiada pasión de pastor esta riqueza de nuestra sociedad que son los chicos y chicas que forman parte de nuestra Iglesia. Pero creo que no, es que ciertamente son distintos de lo que nos venden en la TV como buenos modelos. Al menos en todo lo que se refiere a egoísmo, violencia y odio: ¡Que la detengan!".