22 de marzo de 2019

OMERTA

jueves, 21 de marzo de 2019


OMERTÁ – 22/03/2019

Se viene denunciando reiteradamente el silencio cómplice sobre los crímenes islamistas de la mafia que controla el poder en España. Veamos un caso de tantos.

El pasado día 15 se cumplió un año de un terrible suceso que tuvo como víctima a una niña española de 12 años, violada por un grupo de al menos seis jóvenes musulmanes de entre 15 y 20 años. Sin embargo, este suceso ha permanecido silenciado. Ocurrió en Azuqueca de Henares, provincia de Guadalajara, una urbe industrial de 35.000 habitantes donde han crecido los delitos contra la integridad sexual, según datos del Ministerio del Interior.

Los hechos se desencadenaron a partir de las 13 horas, cuando la menor, se encontraba en compañía de varios amigos en el parque del Lavadero. Entonces, se presentaron varios jóvenes de origen marroquí y uno nigeriano. Algunos de ellos eran conocidos de la víctima por el entorno escolar o de amistades comunes.

Los jóvenes cogieron a la niña y a una de sus amigas y se las llevaron en volandas a un edificio abandonado próximo al parque, la antigua residencia de ancianos que vemos en la fotografía. Allí las introdujeron en una habitación, en donde las retuvieron unos minutos mientras discutían entre ellos en árabe. Minutos después, liberaron a la amiga por ser mora, según le explicó ésta última a la víctima. A continuación, uno de ellos agarró a la niña y la llevó a un baño. Allí, la tumbaron y comenzó el infierno para la víctima a la que sujetaron de manos y piernas, le taparon la boca y comenzaron a violarla. En total, ella cree recordar que fueron al menos cinco o seis, siempre comenzando por uno de los mayores de edad.

La joven chillaba, pero el grupo prolongó las violaciones repetidamente. Sus amigos, fuera, escuchaban los gritos de socorro e intentaron entrar, pero había uno de los agresores en la puerta amenazándoles con un palo para disuadirles diciendo “el que entra, no sale", o sea, amenazándoles de muerte.

La tortura duró 45 minutos, hasta que los agresores la dieron por acabada. Cuando la niña salió a la calle, sus amigos aún estaban ahí. La amiga de la víctima declaró que el mayor, antes de entrar en el edificio, dijo que iba a violar a su amiga y cuando salió dijo que ya había hecho lo que tenía que hacer.

Esa misma tarde, la Guardia Civil de Azuqueca de Henares comenzó sus investigaciones y realizó las primeras detenciones. En total, fueron identificados cuatro menores de origen marroquí, así como dos mayores de edad, un marroquí y un nigeriano.

Según fuentes jurídicas, tres de los menores pactaron con la Fiscalía de Menores tres años de internamiento. De los mayores de edad uno está en prisión preventiva, acusado de agresión sexual y detención ilegal. El otro adulto quedó en libertad.

Del suceso, muy comentado entre los escolares del instituto, no se informó de forma oficial nunca.

Por Nacho Alday.

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