3 de junio de 2010
El Parlamento vasco rechaza apoyar a Garzón y agudiza la soledad del PSOE
ABC
El Parlamento vasco rechaza apoyar a Garzón y agudiza la soledad del PSOE
El PP acusa a los socialistas de «hacer gala de un guerracivilismo irredento» por llevar este asunto a la Cámara y ve en la iniciativa un «esfuerzo por desviar la atención» de la crisis económica
ITZIAR REYERO | VITORIA
Actualizado Jueves , 03-06-10 a las 15 : 00
Si la pasada semana fue la defensa del decreto antidéficit de Zapatero lo que provocó el aislamiento absoluto del PSE en la Cámara de Vitoria, hoy el pleno ha vuelto a poner en evidencia la soledad de los socialistas vascos. Esta vez en su intento por defender la “dignidad profesional” del juez Baltasar Garzón, procesado y apartado de sus funciones en la Audiencia Nacional por un presunto delito de prevaricación por sus investigaciones de los crímenes del franquismo.
La iniciativa socialista, que no ha conseguido el respaldo de ningún otro grupo, ha abierto sin embargo la veda a los grupos nacionalistas, que han denostado la figura del magistrado y han cuestionado las garantías del sistema judicial. “Garzón ha hecho mucho daño, ha provocado mucho dolor en un sector amplio de esta sociedad. No se le puede reconocer, al menos en Euskal Herria, que sea un defensor de la libertad. Ahora la propia justicia española le ha pillado y nos alegramos”, ha afirmado el parlamentario de EA, Jesús Mari Larrazabal.
Un posicionamiento totalmente contrario al pretendido por el portavoz socialista, José Antonio Pastor, quien aventuró hace algunas semanas un “respaldo mayoritario” de la Cámara. La proposición no de ley, defendida por el socialista Mikel Unlazu, pedía que el órgano legislativo manifestara su “solidaridad” y “apoyo” ante la “campaña de acoso a la que está siendo sometido por grupos de ultraderecha”.
“Es un escándalo que un juez que ha tratado de investigar los crímenes del franquismo vaya a ser juzgado por una querella promovida por los herederos del franquismo", denunció el representante socialista. “No se puede consentir que el franquismo le meta un gol a la democracia”, añadió.
Desviar la atención de la crisis
En su turno, el portavoz popular, Leopolodo Barreda, le ha acusado de secundar la segunda parte de los actos de “guerracivilismo irredento” organizados en la Universidad Complutense de Madrid en abril y le ha instado sin éxito a retirar la iniciativa. En su opinión, esta proposición solo persigue “desviar la atención” ante “la que está cayendo”, en referencia a la gestión de la crisis por el Ejecutivo central. “Es una excusa para sacar a pasear los discursos rancios”, ha agregado el parlamentario del PP, para quien “el único responsable” de los hechos que se le imputan a Garzón es el propio magistrado.
El PNV, por su parte, ha criticado que los socialistas hayan planteado esta cuestión en el Parlamento vasco, pero no así en las Cortes Generales, y ha acusado a PSE y PP de utilizar el procesamiento al juez Garzón como un “arma arrojadiza” para ocultar sus problemas internos, como la gestión de la crisis y el caso Gürtel, respectivamente.
El Parlamento vasco rechaza apoyar a Garzón y agudiza la soledad del PSOE
El PP acusa a los socialistas de «hacer gala de un guerracivilismo irredento» por llevar este asunto a la Cámara y ve en la iniciativa un «esfuerzo por desviar la atención» de la crisis económica
ITZIAR REYERO | VITORIA
Actualizado Jueves , 03-06-10 a las 15 : 00
Si la pasada semana fue la defensa del decreto antidéficit de Zapatero lo que provocó el aislamiento absoluto del PSE en la Cámara de Vitoria, hoy el pleno ha vuelto a poner en evidencia la soledad de los socialistas vascos. Esta vez en su intento por defender la “dignidad profesional” del juez Baltasar Garzón, procesado y apartado de sus funciones en la Audiencia Nacional por un presunto delito de prevaricación por sus investigaciones de los crímenes del franquismo.
La iniciativa socialista, que no ha conseguido el respaldo de ningún otro grupo, ha abierto sin embargo la veda a los grupos nacionalistas, que han denostado la figura del magistrado y han cuestionado las garantías del sistema judicial. “Garzón ha hecho mucho daño, ha provocado mucho dolor en un sector amplio de esta sociedad. No se le puede reconocer, al menos en Euskal Herria, que sea un defensor de la libertad. Ahora la propia justicia española le ha pillado y nos alegramos”, ha afirmado el parlamentario de EA, Jesús Mari Larrazabal.
Un posicionamiento totalmente contrario al pretendido por el portavoz socialista, José Antonio Pastor, quien aventuró hace algunas semanas un “respaldo mayoritario” de la Cámara. La proposición no de ley, defendida por el socialista Mikel Unlazu, pedía que el órgano legislativo manifestara su “solidaridad” y “apoyo” ante la “campaña de acoso a la que está siendo sometido por grupos de ultraderecha”.
“Es un escándalo que un juez que ha tratado de investigar los crímenes del franquismo vaya a ser juzgado por una querella promovida por los herederos del franquismo", denunció el representante socialista. “No se puede consentir que el franquismo le meta un gol a la democracia”, añadió.
Desviar la atención de la crisis
En su turno, el portavoz popular, Leopolodo Barreda, le ha acusado de secundar la segunda parte de los actos de “guerracivilismo irredento” organizados en la Universidad Complutense de Madrid en abril y le ha instado sin éxito a retirar la iniciativa. En su opinión, esta proposición solo persigue “desviar la atención” ante “la que está cayendo”, en referencia a la gestión de la crisis por el Ejecutivo central. “Es una excusa para sacar a pasear los discursos rancios”, ha agregado el parlamentario del PP, para quien “el único responsable” de los hechos que se le imputan a Garzón es el propio magistrado.
El PNV, por su parte, ha criticado que los socialistas hayan planteado esta cuestión en el Parlamento vasco, pero no así en las Cortes Generales, y ha acusado a PSE y PP de utilizar el procesamiento al juez Garzón como un “arma arrojadiza” para ocultar sus problemas internos, como la gestión de la crisis y el caso Gürtel, respectivamente.