21 de julio de 2008
Chávez propicia un ataque de Ortega al Rey sólo cinco días antes de su visita a Marivent
ABC - 21/07/08
Chávez propicia un ataque de Ortega al Rey sólo cinco días antes de su visita a Marivent
S. N.
/ MADRID
Lejos de pasar página del capítulo que escribieron hace ahora nueve meses Hugo Chávez y Don Juan Carlos durante la Cumbre Iberoamericana de Santiago de Chile (cuando el Rey mandó callar al presidente venezolano), y a cinco días de su visita a España, Chávez volvió a echar ayer leña al fuego con su alusión al «¿Por qué no te callas?» del Monarca. Y lo hizo en presencia del presidente de Nicaragua, su colega Daniel Ortega, quien ironizó con que Don Juan Carlos debe «aprender a escuchar».
Ortega hizo este comentario tras interrumpir a Chávez cuando éste pronunciaba un discurso en Managua con ocasión del vigésimo noveno aniversario de la revolución sandinista. El mandatario nicaragüense hizo una seña a Chávez que éste interpretó como que le pedía que terminara de hablar. «Aquí nadie te calla», ironizó Ortega cuando el venezolano pidió un minuto más.
Tras escuchar esta frase, Chávez soltó unas risas y parafraseó el «¿Por qué no te callas?» del Rey. Fue entonces cuando le preguntó a Ortega qué mensaje quiere que le transmita a Don Juan Carlos durante su encuentro del próximo viernes. «Decidle al Rey que en la próxima reunión aprenda a escuchar y no mande callar», respondió el presidente de Nicaragua. «Le llevaré un abrazo tuyo al Rey», dijo entre risas Chávez, quien también se reunirá con José Luis Rodríguez Zapatero.
Pero el «teatrillo» montado entre los dos mandatarios no terminó ahí. «El Rey sabe que el pueblo no se calla; el Rey sabe que el pueblo español no se calla; mucho menos que se calle el pueblo venezolano, el pueblo nicaragüense, el pueblo paraguayo, el pueblo latinoamericano. No nos callamos», continuó Daniel Ortega.
Al margen de la alusión de los mandatarios al comentario de Don Juan Carlos, lo cierto es que la visita de Hugo Chávez el viernes al Palacio de Marivent, donde veranean los Reyes, contribuirá a dar por zanjado el incidente de la cumbre de Santiago y consagrará la apertura de una nueva etapa en las relaciones entre ambos países.
Consciente de que su desencuentro con el Rey no ha reportado beneficio alguno a su política en Iberoamérica, Chávez es el primer interesado en abrir esa nueva etapa. De ahí que haya hecho un hueco en su apretada gira por varios países iberoamericanos y europeos para poder estrechar la mano de Don Juan Carlos. La cita tendrá lugar tras su visita a Rusia, Bielorrusia y Portugal.
Un encuentro esperado
El día 25, coincidiendo con la festividad de Santiago Apóstol, será la primera vez que Don Juan Carlos y Hugo Chávez se vean las caras tras aquel episodio de la cumbre, al que Chávez no ha dejado de sacar partido hasta el punto de convertir aquella frase en lema de la oposición antichavista. Sin embargo, no será la primera vez que el presidente venezolano coincida con un miembro de la Monarquía española. Lo hizo a principios de diciembre con Don Felipe, en la toma de posesión de Cristina Fernández de Kirchner como presidenta de Argentina. El encuentro se limitó entonces a un saludo protocolario.
Chávez propicia un ataque de Ortega al Rey sólo cinco días antes de su visita a Marivent
S. N.
/ MADRID
Lejos de pasar página del capítulo que escribieron hace ahora nueve meses Hugo Chávez y Don Juan Carlos durante la Cumbre Iberoamericana de Santiago de Chile (cuando el Rey mandó callar al presidente venezolano), y a cinco días de su visita a España, Chávez volvió a echar ayer leña al fuego con su alusión al «¿Por qué no te callas?» del Monarca. Y lo hizo en presencia del presidente de Nicaragua, su colega Daniel Ortega, quien ironizó con que Don Juan Carlos debe «aprender a escuchar».
Ortega hizo este comentario tras interrumpir a Chávez cuando éste pronunciaba un discurso en Managua con ocasión del vigésimo noveno aniversario de la revolución sandinista. El mandatario nicaragüense hizo una seña a Chávez que éste interpretó como que le pedía que terminara de hablar. «Aquí nadie te calla», ironizó Ortega cuando el venezolano pidió un minuto más.
Tras escuchar esta frase, Chávez soltó unas risas y parafraseó el «¿Por qué no te callas?» del Rey. Fue entonces cuando le preguntó a Ortega qué mensaje quiere que le transmita a Don Juan Carlos durante su encuentro del próximo viernes. «Decidle al Rey que en la próxima reunión aprenda a escuchar y no mande callar», respondió el presidente de Nicaragua. «Le llevaré un abrazo tuyo al Rey», dijo entre risas Chávez, quien también se reunirá con José Luis Rodríguez Zapatero.
Pero el «teatrillo» montado entre los dos mandatarios no terminó ahí. «El Rey sabe que el pueblo no se calla; el Rey sabe que el pueblo español no se calla; mucho menos que se calle el pueblo venezolano, el pueblo nicaragüense, el pueblo paraguayo, el pueblo latinoamericano. No nos callamos», continuó Daniel Ortega.
Al margen de la alusión de los mandatarios al comentario de Don Juan Carlos, lo cierto es que la visita de Hugo Chávez el viernes al Palacio de Marivent, donde veranean los Reyes, contribuirá a dar por zanjado el incidente de la cumbre de Santiago y consagrará la apertura de una nueva etapa en las relaciones entre ambos países.
Consciente de que su desencuentro con el Rey no ha reportado beneficio alguno a su política en Iberoamérica, Chávez es el primer interesado en abrir esa nueva etapa. De ahí que haya hecho un hueco en su apretada gira por varios países iberoamericanos y europeos para poder estrechar la mano de Don Juan Carlos. La cita tendrá lugar tras su visita a Rusia, Bielorrusia y Portugal.
Un encuentro esperado
El día 25, coincidiendo con la festividad de Santiago Apóstol, será la primera vez que Don Juan Carlos y Hugo Chávez se vean las caras tras aquel episodio de la cumbre, al que Chávez no ha dejado de sacar partido hasta el punto de convertir aquella frase en lema de la oposición antichavista. Sin embargo, no será la primera vez que el presidente venezolano coincida con un miembro de la Monarquía española. Lo hizo a principios de diciembre con Don Felipe, en la toma de posesión de Cristina Fernández de Kirchner como presidenta de Argentina. El encuentro se limitó entonces a un saludo protocolario.