30 de junio de 2014

Udienza ai Reali di Spagna

Udienza ai Reali di Spagna

L’OSSERVATORE    ROMANO

Anno CLIV n. 147 (46.689) Citta del Vaticano lunedi 30 giugno-martedi 1 luglio 2014
.




Francesco ha ricevuto in udienza le Loro Maesta il Re Filippo VI e la Regina Letizia di Spagna. I Reali si sono successivamente incontrati con il cardinale Pietro Parolin, segretario di Stato, accompagnato da monsignor Antoine Camilleri, sotto-segretario per i rapporti con gli Stati.

Durante i cordiali colloqui, si e espresso compiacimento per l’odierna visita, la prima all’estero, che segue quella da poco compiuta dal Re Juan Carlos I e dalla Regina Sofia il 28 aprile scorso, auspicio del rafforzamento delle buone relazioni esistenti tra la Santa Sede e la Spagna
.

Nel prosieguo della conversazione sono stati affrontati temi di comune interesse, l’importanza di favorire il dialogo e la collaborazione fra la Chiesa e lo Stato per il bene di tutta la societa spagnola. Infine, si e fatto cenno ad alcune problematiche di carattere internazionale e regionale, con particolare attenzione alle zone di conflitto.

Cristiani all’ascolto dei fratelli ebrei

Incontro dal 15 al 20 luglio ad Angers
Cristiani all’ascolto dei fratelli ebrei
sabato 28 giugno 2014 L’OSSERVATORE ROMANO pagina 7



ANGERS, 27. Scoprire la ricchezza spirituale dell’ebraismo e la vita dei «nostri fratelli maggiori nella fede», far crescere reciprocamente la conoscenza e la stima, trasmettendole alle nuove generazioni: questi i principali obiettivi della sessione organizzata dal 15 al 20 luglio ad Angers in Francia, dal Servizio diocesano per le relazioni con l’ebraismo (Sdrj), in collaborazione con le altre diocesi della provincia ecclesiastica e con il Servizio nazionale per le relazioni con l’ebraismo. «Ciò che i nostri padri ci hanno raccontato non lo terremo nascosto ai nostri figli ma lo racconteremo alla generazione futura»: una citazione del Salmo 78 (3-4) è al centro dell’incontro, intitolato Découvrir le judaïsme. Les chrétiens à l’écoute. Una cerimonia comune, domenica 20 luglio, ricorderà gli ottocentoventiquattro ebrei rinchiusi nell’ex seminario di Angers prima di essere deportati, il 20 luglio 1942, verso il campo di concentramento di Auschwitz. Solo uno dei tanti momenti di condivisione che scandiranno l’evento.

Padre Louis-Michel Renier, responsabile dell’Sdrj, e Pierre Lazarus, membro della comunità ebraica locale, spiegano sul sito on line della Conferenza episcopale francese come programma e contenuti siano stati decisi insieme: «Noi ebrei — afferma Lazarus — lavoriamo in perfetta collaborazione con i nostri fratelli cristiani. Siamo pochi nella regione ma accompagnamo con coerenza il cammino interreligioso intrapreso da anni». In continuità con le sessioni svoltesi nel 2010 all’abbazia cistercense di Melleray e nel 2012 a La Hublais, si alterneranno dibattiti ai quali parteciperanno delegati cristiani (quest’anno fra l’a l t ro è prevista una maggiore apertura ecumenica) ed ebrei, seminari (per esempio sui legami tra liturgia ebraica e liturgia cristiana e fra tradizione rabbinica e Antico Testamento) e incontri in piccoli gruppi, per facilitare il dialogo. Si mangerà kosher (i cibi preparati in conformità alle regole alimentari ebraiche), si assisterà insieme alla benedizione del pane e del vino e si condividerà, abato 19, lo shabbat, la festa del riposo, grazie all’aiuto dei membri delle associazioni cultuali e culturali israelitiche, di rabbini, insegnanti e delegati delle varie «Amicizie ebraiche- cristiane». Per i giovani sono previste attività specifiche, come una serie di ateliers animati da unebreo e da un cristiano.


Una delle caratteristiche dell’incontro è la preo ccupazione di fare riferimento a un ebraismo vivente, attento all’attualità. Nel 2012 a La Hublais, vicino a Rennes, era intervenuta Magda Hollander Lafon, deportata ad Auschwitz a 17 anni. Quest’anno, oltre a una conferenza tenuta da padre Pa t r i ck Desbois, d i re t tore del Servizio nazionale per le relazioni con l’ebraismo, su «Come trasmettere la storia della Shoah», si terrà appunto la cerimonia in memoria dell’anniversario della deportazione degli ebrei da Angers verso la Polonia. Il Servizio nazionale (organismo in seno alla Conferenza episcopale) venne creato dopo il concilio Vaticano II dal padre domenicano Bernard Dupuy per contribuire a risolvere i conflitti tra la Chiesa cattolica e il mondo ebraico, e in seguito a rafforzarne l’amicizia 

Los obispos piden a Wert que fije un horario mínimo de Religión

Los obispos piden a Wert que fije un horario mínimo de Religión

El Ministerio de Educación considera que la propuesta tiene "muy difícil encaje" legal

Primero fueron los obispos del sur de España los que se quejaron por la reducción del horario de la asignatura de Religión en Educación Primaria, una decisión que la nueva reforma educativa deja en manos de las comunidades. Y ahora es la Conferencia Episcopal Española la que muestra su "preocupación" porque, al reducir las horas semanales, "se deja abierta la puerta al incumplimiento tanto del derecho de los padres a educar a sus hijos según sus convicciones".
Cuatro comunidades autónomas -Asturias, Canarias, Galicia y Castilla y León- ya han anunciado que su intención es reducir el próximo curso el horario de la materia confesional respecto a lo que se venía ofertando hasta ahora en los colegios. Además, el Ministerio de Educación también ha decidido bajar el horario semanal en Ceuta y Melilla, donde aún conserva las competencias sobre el sistema de enseñanza. Canarias y el departamento de José Ignacio Wert han sido los que más han reducido la materia, la han dejado en la mitad: se pasa de los 90 a los 45 minutos a la semana.
El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo, ha explicado este viernes que el 25 de junio los obispos se reunieron con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y le trasladaron su preocupación. "Hay cauces de diálogo abiertos" con el Gobierno y las comunidades, ha apuntado Gil Tamayo. Sin embargo, Gil Tamayo sostiene que, "si a esto no se le pone arreglo", el Gobierno debería impedir que sean las comunidades las que establezcan los horarios mínimos de Religión, como se fija en la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). Gil Tamayo ha pedido que el Estado apruebe "una normativa, por ejemplo, un decreto ley, que establezca el horario mínimo de esta enseñanza". Los prelados argumentan que con la anterior Ley Orgánica de Educación (LOE), aprobada en 2006 por el PSOE, así se hacía.
El departamento Wert, pese a que está dispuesto a escuchar las peticiones de los prelados, no parece que vaya a hacer cambios. Un portavoz ministerial ha asegurado este viernes que la petición de la Conferencia Episcopal tiene "muy difícil encaje". Tan difícil que supondría modificar la LOMCE seis meses después de su aprobación. Esta ley establece que al Estado le corresponde marcar los horarios mínimos de las troncales, como Matemática o Lengua. Las autonomías deciden la carga lectiva de las asignaturas específicas y de libre configuración, entre las que está Religión. Además, los centros educativos también tienen margen para tocar los horarios, aunque respetando los mínimos marcados por las Administraciones.
El portavoz de la Conferencia Episcopal ha lamentado que el ministerio tampoco establezca la Religión como materia obligatoria en Bachillerato. Según su interpretación, esto supone un incumplimiento de los acuerdos firmados en 1979 entre la Iglesia y el Estado
La reforma del departamento de Wert ha colmado viejas reivindicaciones de los obispos en algunos aspectos: se elimina Educación para la Ciudadanía y se impone una alternativa a Religión, que se convierte en computable. Pero la Conferencia Episcopal rechaza la forma en la que las autonomías están desarrollando la ley. "El problema afecta a todas las confesiones religiosas. No se trata de ninguna reivindicación de privilegios por parte de la Iglesia católica, sino, ante todo, de garantizar el derecho constitucional de los padres a educar a sus hijos según sus propias convicciones", argumentan los obispos. "Esta situación de discriminación grave provocará además despidos de profesores de religión", apuntan.

El policía se pone a tiro

El policía se pone a tiro

Un agente analiza las experiencias límite de una treintena de compañeros

Cinco de la madrugada. Noche cerrada de agosto en La Línea de la Concepción (Cádiz). El bochorno asfixiante es difícil de combatir pese a la brisa marina. De repente, un Volkswagen Golf atraviesa la calle como una bala. Es un vehículo nuevo, huele a traficante y no pasa desapercibido para una pareja de policías locales. Ernesto Pérez Vera, un experimentado agente, no duda en interceptar el coche: “Buenas noches, ¿me da la documentación?”. El conductor abre la puerta. Parece que el motor está parado, pero el vehículo comienza a circular marcha atrás a gran velocidad durante 60 interminables metros. Sus piernas quedan atrapadas bajo la puerta, sus manos se aferran al marco con todas sus fuerzas. Ni siquiera se suelta cuando el coche frena y de nuevo recorre otros 100 metros, esta vez en dirección contraria. No recuerda cómo, pero logró disparar dos tiros al aire primero y otros dos a las piernas del conductor, que dejó entonces de estamparle contra los coches aparcados —hasta ocho vehículos—. Se soltó y perdió el conocimiento.
Tardó un año en recuperarse. Sin ser el mismo, aguantó seis más en la Policía. Pero el pasado agosto, con cuatro operaciones, ocho tornillos en piernas y espalda... tuvo que jubilarse con tan solo 43 años: “De pie tengo poco recorrido”, comenta jocoso. Está casado y es padre. Ha dejado de participar en carreras. Ha abandonado la natación. Pero no ha perdido su afición por practicar tiro. Tal vez porque está en deuda con su arma.
Hijo y nieto de policías, lo suyo era vocación. Ingresó en 1987 como militar, más tarde se dedicó a la protección de personalidades y en 2000, ingresó en la Policía Local de La Línea, donde llegó a liderar el Grupo Especial de Seguridad Ciudadana. Estaba altamente preparado para los enfrentamientos armados, pero aquella noche su instrucción “no sirvió de nada”, reconoce.
Ante el peligro,
las pulsaciones
suben de 70 a 220 y
se pierden “habilidades
motoras finas”
Tras aquella experiencia comienza a publicar artículos sobre técnicas de entrenamiento, armas, balística... y crea un blog. A través de las redes conoce a Fernando Pérez Pacho, experimentado psicólogo clínico mallorquín, con 20 años de experiencia en formación policial. La primera vez que se encuentran deciden hacer un libro con historias tan reales como dolorosas. Tras dos años de entrevistas a otros 26 agentes que lucharon en la calle por salvar la vida nace En la línea de fuego: La realidad de los enfrentamientos armados (Anaya).
“Algunos mataron a sus agresores, otros los hirieron, otros ni se defendieron. Son enfrentamientos con armas de fuego, machetes de caza, destornilladores o grandes cuchillos de cocina”, comenta Pérez Vera. Todos reconocen que no estaban preparados ante el elemento sorpresa: “Uno se olvidó de cargar la pistola cuando oyó los disparos del criminal al que se enfrentaba. Otro montó el arma cinco veces antes de efectuar el primer tiro. Otro realizó 28, cambiando incluso de cargador, y a cinco metros de distancia no hirió a nadie”.
Paralizado, por ejemplo, se quedó el agente que acudió al domicilio de una familia víctima de malos tratos. No contaba con que en el pasillo le iba a esperar el presunto agresor armado con un cuchillo de grandes dimensiones en cada mano. Se le echó encima y, en vez de sacar el arma, intentó frenarlo sujetándole los filos. Los guantes anticorte evitaron graves heridas, pero aun así le dañó los tendones. Cuando logró sacar el arma, el único tiro fue al aire y perdió la pistola hasta que su compañero le ayudó a reducir al atacante.
Acudió a la llamada de un atraco. El recibimiento: 30 tiros antes de salir del coche
Gabriel no es su nombre real. Este policía se enfrentó a una peligrosa banda organizada que juró vengarse de él y prefiere tomar precauciones. Con poco más de un año de experiencia acudió a la llamada de un atraco. El recibimiento: 30 tiros antes de salir del coche. Las balas volaban por todas partes como si de una guerra se tratara. “En esos momentos yo me daba por muerto. Vi que de allí no iba a salir y pensé: ‘Ya está, aquí caigo”. Recibió un tiro, una bala que le hubiera matado de no haber llevado el chaleco bajo la camisa, como era su costumbre, pese a los comentarios jocosos de los compañeros. No se avergüenza de confesar que pasó miedo: “Quien diga lo contrario ante una situación así miente; además, el miedo ayuda a reaccionar”. Tras superar “ese momento en el que sólo piensas en sobrevivir y cerciorarte de que todavía estaba vivo, me dije: ‘¡Venga!, hay que tirar palante”. Consiguió salir del coche, parapetarse y usar su arma. Únicamente disparó seis cartuchos, pero logró abatir a uno de los criminales. Todo el tiroteo duró menos de dos minutos a pesar de que Gabriel hubiera jurado que fue más de media hora. No tiene remordimientos por haber provocado una muerte: “Era necesario, tres viandantes fueron heridos en la refriega y, si no les hubiéramos parado, podría haber muerto medio centenar. Eran muy violentos, estaban muy preparados con munición militar”. Gabriel nunca había disparado la pistola que llevaba.
¿Por qué hasta los miembros especializados en asalto fallan o tardan más de lo esperado en reaccionar? Fernando Pérez Pacho es tajante: “Todos los entrevistados reconocieron que dispararon como pudieron. Todos tenían dudas, pensaban que era una situación irreal y que la preparación que tenían no era la adecuada”.
En los momentos de peligro, el ritmo cardiaco puede subir de 70 pulsaciones por minuto a 220 en apenas medio segundo. La adrenalina se dispara y el pensamiento común es el de sálvese quien pueda. Pero el policía ha de enfrentarse al peligro, ha de luchar contra la naturaleza que nos prepara para huir. Y, sobre todo, ha de luchar contra los cambios que sufre el cuerpo. Al llegar a las 115 pulsaciones por minuto se pierden “las habilidades motoras finas”, la coordinación ojos-manos, que se traduce en dificultad para realizar tareas múltiples como llamar por radio a la vez que se saca el arma. A las 145 pulsaciones se pierden las habilidades motoras complejas: ya no se puede marcar un teléfono o recordar un número, se tienen dificultades para enfocar y se pierde audición. Con 175, las pupilas se dilatan y se produce el “efecto túnel”, sólo se ve lo que está delante, “y si hay un agresor en tu lateral no lo detectas porque tu campo visual se reduce hasta un 70%”, añade Pérez Pacho. Al superar las 185 se llegan a realizar comportamientos irracionales, acciones inefectivas “como salir de detrás de un coche y perder protección o quedarse paralizado”.
Marcos, por ejemplo, reconoce que, al verse amenazado por un esquizofrénico armado con un cuchillo, no se le pasó por la cabeza sacar su arma. “Tan sólo cuando vi que lo hacía mi compañero lo imité”. “En la academia, por ejemplo, nos dijeron que no lleváramos el arma cargada en la recámara porque en el momento de usarla, el simple hecho de realizar esa acción disuade al agresor. Pero monté el cartucho y no se asustó. Si ni yo lo oí”.
“Lo peor no es la agresión en sí, aunque te parezca mentira”, relata el expolicía. “Sufrí más con la incomprensión de los compañeros, con esos comentarios de que me lo había buscado parando a un tipo así, yendo por esa barriada. Eso ha sido duro”. 

Educación lleva la protección de los alumnos transexuales a las aulas

Educación lleva la protección de los alumnos transexuales a las aulas

Los escolares vestirán el uniforme que sea acorde con su identidad de género


Luciano Alonso (con corbata), junto a miembros de colectivos transexuales. / PACO PUENTES
La Consejería de Educación ha empezado a trasladar a las aulas algunos de los aspectos de la nueva ley de transexualidad, aprobada el miércoles por PP, PSOE e IU en el Parlamento autónomo. Entre esas medidas figura que los alumnos de Andalucía podrán utilizar la vestimenta con la que se sientan identificados. En el caso de que en el colegio o instituto sea obligatorio el uniforme diferenciado por sexos, “se reconocerá el derecho del escolar a vestir con ropas o uniforme femenino o masculino, en función de la identidad de género manifestada”, ha apuntado la Consejería de Educación. Este departamento ha presentado el protocolo sobre identidad de género que se aplicará en todos los centros de la comunidad sostenidos con fondos públicos, también en los concertados. Esta posibilidad —la de poder vestir con falda en el colegio— era lo que planteó hace unos meses la familia de una niña de seis años transexual a un centro concertado de Málaga, que depende del obispado. El colegio se negó y la menor acabó cambiándose de centro escolar. La Consejería de Educación, que abrió un expediente a este concertado, acabó archivándolo sin consecuencias para la dirección del colegio. La Junta dejó el caso en un “apercibimiento” al centro.

Públicos y concertados tendrán que cumplir con el nuevo protocolo
A raíz de este caso, y de otros tres repartidos por Málaga y Granada en los que el problema se solventó, la consejería envió unas instrucciones a la dirección de los cuatro centros en las que se explicaba la forma de actuar. Esas instrucciones, con algunas pequeñas modificaciones, son la base del protocolo presentado por la consejería.
En el texto también se incluirá que el personal de los centros docentes se “dirigirá al alumno o alumna con el nombre que acuerde la familia con la dirección del colegio o instituto”. Además, se deberá “adecuar la documentación administrativa del centro docente (listas de clase, boletín informativo de calificaciones, carne de estudiante...) en aquellas situaciones en las que se estime conveniente, a fin de tener en consideración el género con el que se siente identificado el alumno o la alumna”. Sin embargo, Educación establece una salvedad: “en el expediente oficial del alumno o la alumna, y hasta que legalmente proceda”, se mantendrán “los datos de identidad registrados a efectos oficiales”. Esta cláusula busca evitar problemas legales. El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha remitido un informe al Parlamento andaluz en el que se indica que cinco artículos de la nueva ley de transexualidad invaden algunas competencias estatales. Entre los artículos que mencionaba el informe ministerial estaba el dedicado a los centros escolares y el tratamiento que deben recibir los alumnos en la documentación.

El centro se debe dirigir al menor por el nombre con el que se identifique
El protocolo aprobado por el departamento de Luciano Alonsotambién establece que los centros evitarán las actividades “diferenciadas por sexo”. “Si en alguna ocasión estuviese justificada esta diferenciación, el profesorado tendrá en consideración el género con el que la alumna o el alumno se siente identificado”. Por último, se señala que, si los centros no disponen de aseos o vestuarios “unisex”, se garantizará que “el alumnado transexual tenga acceso a los aseos y vestuarios que le corresponda de acuerdo con su identidad sexual”.
Todas estas medidas coinciden con las reivindicaciones de la menor que se vio obligada a cambiar de centro escolar y con las que venían proponiendo las asociaciones de defensa de los derechos de los transexuales. Este protocolo presentado este viernes, cuando termine su tramitación, se incorporará a la orden de la Consejería de Educación, de 20 de junio de 2011, para “la promoción de la convivencia”. Esta norma cuenta ya con cuatro protocolos de actuación para casos de maltrato infantil, acoso escolar, violencia de género y agresiones al profesorado.
Francisco Javier García Perales, jefe de servicio de Convivencia e Igualdad de la consejería, ha resaltado que “todos los centros sostenidos con fondos públicos” deberán cumplir el nuevo protocolo. “El incumplimiento de una orden tiene consecuencia”, apunta García. Entre esas consecuencias puede estar una sanción económica o la pérdida del concierto, en el caso de los centros de titularidad privada.