17 de noviembre de 2017
El jefe del espionaje exterior ruso acusa a España de “represión política”
El
jefe del espionaje exterior ruso acusa a España de “represión política”
El director de los servicios de inteligencia
exterior reprocha la “brutal violencia policial” que las fuerzas de seguridad
emplearon el 1 de octubre
El ministro
de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, este jueves en Moscú. YURI KADOBNOV AFP
El director de los servicios de
inteligencia exterior de Rusia, Serguéi Naryshkin, acusó a las autoridades
españolas de “represión política” contra los impulsores del referéndum de
Cataluña, que fue suspendido por el Tribunal Constitucional, y reprochó la “brutal violencia policial” que las fuerzas de seguridad
emplearon el 1 de octubre en algunos colegios electorales.
Las declaraciones del alto funcionario ruso
se producen poco después de que el Gobierno de Mariano Rajoy dijese constatar la intervención de hackers procedentes de Rusia y Venezuela en la crisis catalana. Este calificó la consulta impulsada por
la Generalitat como “suprema forma de expresión democrática de la voluntad
popular” durante la intervención que realizó en una conferencia dedicada al 30
aniversario de la fundación del Instituto de Europa (IE). Integrado en la
Academia de Ciencias de Rusia, el IE se dedica a estudiar los problemas del
continente, organiza diálogos sobre ellos y es uno de los think
tanks de
carácter consultivo, que elabora análisis, informes e ideas para las
instituciones que formulan la política exterior rusa.
Las élites europeas, dijo Naryshkin, se
“continúan posicionando como ejemplares portadores de la democracia”. “Sin
embargo”, continuó, “cuando en Cataluña los resultados del referéndum, como la
suprema forma de expresión democrática de la voluntad popular, les resultaron
incómodos, no solo se negaron a reconocerlos, sino que sometieron a los
iniciadores de la votación a la represión política de hecho, y a los
participantes de las acciones callejeras en apoyo de la independencia a una
brutal violencia policial”.
Naryshkin mencionó Cataluña junto a otros
temas en el marco de una exposición crítica sobre la política de la UE. El jefe
del espionaje ruso hizo un “paralelo histórico” y una comparación “curiosa”
entre el comportamiento del Gobierno español y la joven Rusia soviética, que en
el otoño de 1917 concedió la independencia a Finlandia, porque era una “decisión
justa desde el punto de vista histórico y verdaderamente democrática”. “Las
autoridades de España, país miembro de la UE, país que se considera Estado de
derecho, actuaron de otro modo”, sentenció Naryshkin.
Finlandia obtuvo su independencia el 6 de
diciembre de 1917, aprovechando la revolución bolchevique y su proclamación del
derecho de autodeterminación de los “pueblos de Rusia”.
Naryshkin es presidente de la sociedad de
historia de Rusia, y como tal figuraba en el programa de la conferencia de aniversario
del IE, cuyo anfitrión era el director del instituto, Alexéi Gromiko, nieto del
legendario ministro de Exteriores soviético Andréi Gromiko.
Entre los asistentes al acto estaban el
jefe de la comisión de relaciones internacionales del consejo de la Federación
(cámara alta), Konstantin Kosachov, y el representante de Rusia en la OTAN,
Alexandr Grushko. Los asistentes constataron el progresivo distanciamiento
entre la UE y Rusia.
Naryshkin trabajó con Vladímir Putin en la
alcaldía de San Petersburgo y llegó a ser jefe de la Duma estatal (Cámara baja
del Parlamento), de donde pasó en otoño de 2016 a dirigir el servicio de
espionaje exterior.
El funcionario subrayó que su intervención
estaba “basada en el análisis de la información” que llega al servicio que
dirige. Se trata, agregó, tanto de “documentos no públicos” como de “opiniones
públicas” de altos cargos de la política mundial. Naryshkin matizó, no
obstante, que Rusia está interesada en que la UE sea un “socio fuerte, fiable y
de desarrollo estable”.
Perjudicar las relaciones
Pero esta no fue la única intervención de
una autoridad rusa ayer sobre la polémica. La portavoz del ministerio de
Exteriores de Rusia, María Zajárova, dijo que las acusaciones de “injerencia
rusa” en el problema de Cataluña “perjudican las relaciones” entre los dos
países. “Quisiéramos que nuestros colegas españoles comenzaran a responder de
sus palabras y presentaran hechos concretos”, afirmó la portavoz. “Lamentamos
profundamente que la ola de campañas antirrusas que se ha desatado en los
medios de comunicación occidentales haya sido respaldada en Madrid a nivel
oficial en el contexto de la crisis catalana”, señaló.
Zajárova manifestó “especial perplejidad”
por las palabras del ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, sobre el “supuesto
interés de Rusia en debilitar a España” y reiteró que Rusia ha mantenido una
posición firme sobre el tema de Cataluña. También acusó a las autoridades
españolas de “ignorar los factores objetivos y de dejarse llevar de forma
injustificada por acusaciones sin fundamento” que proceden de “fuentes dudosas
y no embellecen a la diplomacia española”. “El único resultado de pasos como
estos será el perjudicar las relaciones hispano-rusas", agregó. Preguntada
sobre el aumento del número de países que se quejan de “injerencia rusa”,
Zajárova afirmó que las pruebas son nulas y que las acusaciones responden a
dificultades en la política interna de los países acusadores. “En lo que se
refiere a España, es un absurdo. La posición rusa era precisa y la hemos confirmado
en conversaciones con los españoles a todos los niveles”, dijo.
Tras la desintegración de la URSS, Rusia
necesitó dos guerras para someter el territorio independentista de Chechenia.
La primera se prolongó de 1994 a 1996 y la segunda, de agosto de 1999 a 2003,
año en que aquel territorio caucásico aprobó en referéndum una constitución
local que lo subordinaba a Moscú. Tras los combates y los bombardeos de dos
contiendas, Grozni, la capital de Chechenia, era una fantasmal ciudad en
ruinas. El jueves, cuando los altos cargos rusos criticaban la política
europea, el nuevo embajador de la UE en Moscú, el alemán Markus Ederer, marcó
las diferencias al comparar la Grozni de posguerra con Barcelona. “Después de
que arreglemos Cataluña de un modo u otro, Barcelona tendrá mejor aspecto que
Grozni. Eso sí lo puedo decir. Estoy seguro de eso, porque actuamos de acuerdo
con el Estado del derecho, tal como es percibido en el conjunto de Europa”,
señaló.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario