14 de junio de 2008

Un centro de Lérida trata a 20 niños por adicción al móvil

ABC - 14/06/08

Un centro de Lérida trata a 20 niños por adicción al móvil

ABC. LÉRIDA.
Las nuevas tecnologías muestran una vez más su cara menos amable: la irrefrenable dependencia que sufren algunos jóvenes del uso de las más modernas formas de comunicación. Si su obsesión por estar siempre pegados al teléfono es uno de los problemas con los que se pueden encontrar los padres, ahora también deberán poner atención a los programas de mensajería instantánea. Y nuestro país no es una excepción.
El Centro de Salud Mental Infantil y Juvenil de Lérida está tratando a una veintena de menores de edad por su adicción al uso de internet, teléfono móvil y programas tipo Messenger y los últimos casos han sido los de dos jóvenes de 12 y 13 años. El trastorno que les produjo su uso indiscriminado les llevó incluso al fracaso escolar. «Llegaron por su adicción al Messenger pero vimos que también tenían adicción al móvil», señaló la directora del centro Maite Utgés, en declaraciones al diario «La Vanguardia».
La avanzada obsesión de los dos niños por el móvil y los mensajes instantáneos llevó a sus padres a recurrir al centro hace tres meses, en el caso del joven de 12 años, y siete meses, en el caso del de 13. Ambos habían comenzado a utilizar el móvil un año y medio antes de comenzar su rehabilitación sin ningún tipo de control parental. La adicción llegó a tal extremo, que uno de ellos aprovechaba todas las propinas que le daban sus padres sólo para recargar la tarjeta del móvil. La directora Maite Utgés calcula que el tratamiento de estos niños podría durar al menos dos años.
Mismo origen
Pero estos dos casos no son los únicos de este centro catalán, que atiende a 20 niños y jóvenes enganchados a internet, de los cuales 17 son también adictos al Messenger. Como relataron los responsables del centro, una de las causas para caer en esta adicción es la falta de control por parte de los padres. Tanto los trastornos producidos por internet como la adicción al móvil y al Messenger tienen los mismos orígenes.