18 de noviembre de 2009
El capitán del 'Alakrana': "No hubieran podido disparar el arma sin caerse"
ELPAIS
REPORTAJE: La liberación del 'Alakrana'
El capitán del 'Alakrana': "No hubieran podido disparar el arma sin caerse"
Iker Galbarriatu relata cómo fueron los 47 días de secuestro y el rescate: "El patrón va con lo puesto; nos han robado a todos"
NATALIA JUNQUERA 18/11/2009
Iker Galbarriatu ha permanecido 47 días apartado de su tripulación, junto al patrón del Alakrana, en el puente de mando a la espera de que terminara el secuestro del atunero que capitanea mientras faenaba en aguas del océano Índico. No habían visto al resto de marineros desde el pasado 2 de octubre y, cuando por fin se reencontraron, se vivieron momentos "muy emocionantes" a bordo del pesquero: "Cuando nos hemos visto libres ha sido una explosión de alegría", ha asegurado Galbarriatu en conversación telefónica.
El capitán del Alakrana ha confirmado que todos los marineros se encuentran bien y "aliviados", aunque alguno está "más pachucho". Nada más marcharse los últimos piratas, dos médicos de la Armada subieron a bordo para reconocer a los tripulantes y confirmar su estado de salud: "Uno tiene una piedra en un riñón y otro la tensión muy alta, pero en general estamos bien".
Galbarriatu ha relatado que, el día antes de la liberación del atunero, "llegaron muchos piratas" al Alakrana, quienes les explicaron cómo se iba a desarrollar la operación de rescate y les dieron las órdenes oportunas: "No podíamos levantar el ancla hasta que hubieran abandonado el barco los últimos cinco piratas".
El capitán además ha relatado que el momento más difícil de la negociación, cuando los piratas amenazaron con asesinar a tres tripulantes que supuestamente habían bajado a tierra, no fue más que eso: una amenaza de los secuestradores. En realidad, asegura Galbarriatu, ningún marinero abandonó nunca el Alakrana, pero él no podía saberlo.
Los marineros no vieron con sus ojos si se entregaba o no el rescate de 2,7 millones de euros, ya que les trasladaron a otra parte del barco en ese momento, "aunque sí pudimos oír cómo caía" el fardo en el que supuestamente se hizo entrega del dinero a los piratas.
Unos piratas que, tal y como ha contado el capitán del barco, tenían entre 20 y 40 años y estaban muy delgados "El kalashnikov [fusil de asalto que utilizaban los piratas y que pesa unos 5 kilogramos] les doblaba la espalda; no hubieran podido disparar el arma sin caerse". La comunicación con ellos, además, ha sido muy difícil ya que únicamente dos chapurreaban inglés.
Los somalíes arrasaron "con todo el mobiliario", explica Galbarriatu, a quien le sorprendió que no supieran "ni abrir un cajón". El capitán relata cómo se llevaron todo lo que pensaban que era de valor: ordenadores, móviles, discos duros, cargadores, cámaras, ropa, etcétera. "El patrón va con lo puesto", afirma, "nos han robado a todos".
Ahora toca volver a casa, ya que prevén relevar a toda la tripulación que iba en el Alakrana. El barco tendrá que ser reparado de los impactos de bala que ha recibido y su mobiliario repuesto casi al completo. Las pérdidas han sido grandes, asegura Galbarriatu, "porque estaba siendo una buena temporada".
El capitán y el resto de los tripulantes deberán ahora tomar una decisión "Algunos compañeros tienen dudas, no saben si van a volver al mar, pero ahora lo que hay que hacer es ir a casa, descansar y meditarlo. Y en frío decidir".
Muere en un tiroteo el capitán de un carguero secuestrado
El capitán del carguero con bandera de las Islas Vírgenes secuestrado esta semana ha muerto en un tiroteo durante el secuestro, ha informado un pirata somalí. "El capitán del carguero químico murió ayer noche por las heridas de bala que recibió durante el secuestro" ha declarado a Reuters el pirata Mohamed. "El barco se dirige a Haradheere con el cadáver del capitán". El MV Theresa VIII fue secuestrado el lunes con una tripulación de 28 norcoreanos.
REPORTAJE: La liberación del 'Alakrana'
El capitán del 'Alakrana': "No hubieran podido disparar el arma sin caerse"
Iker Galbarriatu relata cómo fueron los 47 días de secuestro y el rescate: "El patrón va con lo puesto; nos han robado a todos"
NATALIA JUNQUERA 18/11/2009
Iker Galbarriatu ha permanecido 47 días apartado de su tripulación, junto al patrón del Alakrana, en el puente de mando a la espera de que terminara el secuestro del atunero que capitanea mientras faenaba en aguas del océano Índico. No habían visto al resto de marineros desde el pasado 2 de octubre y, cuando por fin se reencontraron, se vivieron momentos "muy emocionantes" a bordo del pesquero: "Cuando nos hemos visto libres ha sido una explosión de alegría", ha asegurado Galbarriatu en conversación telefónica.
El capitán del Alakrana ha confirmado que todos los marineros se encuentran bien y "aliviados", aunque alguno está "más pachucho". Nada más marcharse los últimos piratas, dos médicos de la Armada subieron a bordo para reconocer a los tripulantes y confirmar su estado de salud: "Uno tiene una piedra en un riñón y otro la tensión muy alta, pero en general estamos bien".
Galbarriatu ha relatado que, el día antes de la liberación del atunero, "llegaron muchos piratas" al Alakrana, quienes les explicaron cómo se iba a desarrollar la operación de rescate y les dieron las órdenes oportunas: "No podíamos levantar el ancla hasta que hubieran abandonado el barco los últimos cinco piratas".
El capitán además ha relatado que el momento más difícil de la negociación, cuando los piratas amenazaron con asesinar a tres tripulantes que supuestamente habían bajado a tierra, no fue más que eso: una amenaza de los secuestradores. En realidad, asegura Galbarriatu, ningún marinero abandonó nunca el Alakrana, pero él no podía saberlo.
Los marineros no vieron con sus ojos si se entregaba o no el rescate de 2,7 millones de euros, ya que les trasladaron a otra parte del barco en ese momento, "aunque sí pudimos oír cómo caía" el fardo en el que supuestamente se hizo entrega del dinero a los piratas.
Unos piratas que, tal y como ha contado el capitán del barco, tenían entre 20 y 40 años y estaban muy delgados "El kalashnikov [fusil de asalto que utilizaban los piratas y que pesa unos 5 kilogramos] les doblaba la espalda; no hubieran podido disparar el arma sin caerse". La comunicación con ellos, además, ha sido muy difícil ya que únicamente dos chapurreaban inglés.
Los somalíes arrasaron "con todo el mobiliario", explica Galbarriatu, a quien le sorprendió que no supieran "ni abrir un cajón". El capitán relata cómo se llevaron todo lo que pensaban que era de valor: ordenadores, móviles, discos duros, cargadores, cámaras, ropa, etcétera. "El patrón va con lo puesto", afirma, "nos han robado a todos".
Ahora toca volver a casa, ya que prevén relevar a toda la tripulación que iba en el Alakrana. El barco tendrá que ser reparado de los impactos de bala que ha recibido y su mobiliario repuesto casi al completo. Las pérdidas han sido grandes, asegura Galbarriatu, "porque estaba siendo una buena temporada".
El capitán y el resto de los tripulantes deberán ahora tomar una decisión "Algunos compañeros tienen dudas, no saben si van a volver al mar, pero ahora lo que hay que hacer es ir a casa, descansar y meditarlo. Y en frío decidir".
Muere en un tiroteo el capitán de un carguero secuestrado
El capitán del carguero con bandera de las Islas Vírgenes secuestrado esta semana ha muerto en un tiroteo durante el secuestro, ha informado un pirata somalí. "El capitán del carguero químico murió ayer noche por las heridas de bala que recibió durante el secuestro" ha declarado a Reuters el pirata Mohamed. "El barco se dirige a Haradheere con el cadáver del capitán". El MV Theresa VIII fue secuestrado el lunes con una tripulación de 28 norcoreanos.