26 de septiembre de 2008

Un millar de cadáveres sin nombre

ABC - Lunes 22, septiembre 2008 - Últ. actualización 15:42h

Un millar de cadáveres sin nombre

EFE.
MADRID
Lunes, 22-09-08
Cadáveres anónimos que nadie reclama o abandonados en descampados, víctimas de ajustes de cuentas, enterrados o quemados por sus asesinos, inmigrantes que fallecen en alta mar... Son más de mil cuerpos inhumados en fosas comunes y que, a día de hoy, esperan a que se les pongan nombres y apellidos, sólo en la demarcación de la Guardia Civil.
Tal y como explica el jefe del laboratorio central de Criminalística de la Guardia Civil, Francisco Montes, siempre que se localiza un cadáver del que se desconoce su identidad se pone en marcha un protocolo que arranca con la toma de huellas dactilares e incluso en el caso de grandes quemados se aplica un tratamiento a los dedos porque en ocasiones es posible recuperar parte de su dibujo por medio de la hidratación de la yema del dedo.
De forma paralela, los investigadores elaboran un minucioso informe que recoge los datos antropométricos del cuerpo: estatura, peso, posibles cicatrices, lunares, marcas de nacimiento o tatuajes. En determinados casos también se fotografía el rostro para compararlas con una base de datos conjunta de Policía y Guardia Civil, aunque este procedimiento no aporta habitualmente datos significativos.
Si ninguna de estas pesquisas da resultado los investigadores pasan a estudiar la ficha dental. Se analizan las piezas que faltan, si hay arreglos, empastes o implantes, y se cotejan con radiografías o informes odontológicos facilitados por los familiares. Sólo si fallan estas tres líneas de investigación se decide realizar un análisis de ADN. La muestra puede conseguirse de todos los tejidos blandos, aunque en los esqueletos se acude directamente a la pulpa dentaria.
Los dientes soportan muy bien el fuego y la humedad, dos de los elementos «más perniciosos» para el trabajo de identificación. También se emplean los huesos largos o el esternón, por su resistencia al paso del tiempo. La base de datos nacional de ADN cuenta ya con 60.000 entradas, entre cadáveres sin identificar, delincuentes fichados e indicios forenses encontrados en escenas de crímenes y que pueden ayudar a localizar a su autor.
Hallada muerta en Valencia
El cadáver de una joven de unos 20 años fue encontrado ayer por una pareja de paseantes enterrado en una zona de campo cerca de Macastre (Valencia). El cuerpo, ayer sin identificar y sin que se conocieran las causas de la muerte, podría llevar sepultado más de diez meses y estaba en un avanzado grado de descomposición.