1 de octubre de 2009

España se niega a ceder a Italia el mando de la base de Herat

ELPAIS

España se niega a ceder a Italia el mando de la base de Herat

Chacón visita las instalaciones donde los militares españoles instruyen a los afganos

MIGUEL GONZÁLEZ | Kabul 01/10/2009

La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha realizado su quinta visita a Afganistán desde que tomó posesión del cargo, en abril de 2008, lo que supone una vez cada cuatro meses. No es para menos. El actual despliegue en Afganistán es el más voluminoso que han tenido nunca la Fuerzas Armadas españolas en el exterior, entre el contingente permanente (780 efectivos a los que se sumarán en breve 220) y temporal (unos 700) y también "el más duro, más arriesgado y más complejo", en palabras de Chacón.

Por eso cada viaje es diferente y el de hoy se ha plasmado en dos hechos simbólicos. El buscado ha sido la primera visita a la base de Camp Stone, donde 52 instructores entrenan a un grupo logístico y a unidad de base del Ejército afgano, y un sargento español saludó a la ministra como "señora presidenta" en un lapsus. La "afganización" de la seguridad; es decir, la construcción de un Ejército y una policía afganas autosuficientes son, para el Gobierno español y sus socios de la OTAN, la única vía para que puedan retirarse a medio plazo las tropas extranjeras, aunque por lo visto hoy aún queda mucho por hacer. "Esta tarea es más necesaria que nunca. Se trata de que cuanto antes los afganos sean capaces de tomar las riendas de su propio país", ha argumentado Chacón.

El segundo símbolo, aunque involuntario, ha sido el hecho de que Chacón y su comitiva hayan utilizado tres helicópteros para desplazarse desde la base de Herat a Camp Stone, a sólo 12 kilómetros, ¿Por qué? Porque la OTAN no es capaz de garantizar la seguridad de las carreteras ni siquiera en las inmediaciones de sus mayores bases. El pasado domingo un atentado suicida contra el ministro de Energía y ex señor de la guerra, Ismail Khan, en Herat dejó 14 muertos. Lo paradójico es que Khan, que salió ileso, culpó a su compañero de gabinete, el ministro de Interior.

La visita de Chacón se produce cuando aún se conocen los resultados de las elecciones presidenciales del pasado 20 de agosto ni, por tanto, si habrá segunda vuelta y tendrá que prorrogar su estancia el batallón de 450 soldados enviado por España para garantizar la seguridad de los comicios. Todos los expertos dan por hecho que el resultado se conocerá la semana que viene y algunos se atreven a vaticinar, y no sólo por intuición, que Karzai ganará con el 52,4% de los votos. En cualquier caso, el reelegido presidente saldrá muy debilitado por los abrumadores indicios de fraude y la escasa participación. "Han sido unas elecciones más o menos limpias, desde los patrones afganos", sostienen fuentes gubernamentales.

Chacón ha aterrizado a las ocho de la mañana hora local (5.30 en la España peninsular) en el aeropuerto de Kabul, donde ha descubierto una placa en recuerdo de los 62 militares muertos en el accidente del Yak-42, que partió precisamente desde aquí. "Es terrible que ellos velaran por la seguridad de los demás y se escatimase con la suya", ha comentado Miguel Ángel Sencianes, uno de los tres familiares de los fallecidos que acompañó a la ministra. A continuación, ha asistido a la toma de posesión del coronel del Ejército del Aire Rubén García Servert, que durante los próximos seis meses controlará el aeropuerto de la capital afgana, al frente de un equipo de mas de 350 personas, de los que 70 (66 militares y cuatro guardias civiles) son españoles.

Pero el aeropuerto cuyo control más interesa a España es el de Herat. Italia ha pedido a España que le ceda el mando de esa base, que actualmente ostenta el coronel del Ejército del Aire Francisco Molina Miñana, con el argumento de que los militares italianos allí destinados son más (unos 1.000 frente a 550) y de que España va a concentrar sus unidades de combate en la base de Qal-i-Naw. Tanto Chacón, a quien el ministro de Defensa italiano se lo planteó en la reciente cumbre bilateral de Cerdeña, como el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Julio Rodríguez, a quien se lo pidió su homólogo italiano, han dado la misma respuesta: España mantendrá en Herat su base logística y, además, cree que tiene derecho a conservar dicho mando ya que el jefe máximo de la OTAN en la región oeste es siempre un general italiano. Según fuentes de Defensa, Italia se ha contentado con la respuesta. Fuentes militares sospechan, sin embargo, que a no mucho tardar volverá a poner esta demanda sobre la mesa.