14 de octubre de 2009
Éxito de taquilla extrasensorial 'Paranormal activity'
ELPAIS
Éxito de taquilla extrasensorial 'Paranormal activity',
filme de terror de 11.000 euros, recauda cinco millones en un fin de semana en EE.UU
TONI GARCÍA - Barcelona - 14/10/2009
Primero fue Halloween (1978, John Carpenter), después El proyecto de la bruja de Blair (1999, Daniel Myrick & Eduardo Sánchez) y ahora es el turno de Paranormal activity (2009, Oren Peli). Parece que el terror de bajo presupuesto consigue dar, de cuando en cuando, con el resorte adecuado para maximizar una inversión mínima.
Primero fue Halloween (1978, John Carpenter), después El proyecto de la bruja de Blair (1999, Daniel Myrick & Eduardo Sánchez) y ahora es el turno de Paranormal activity (2009, Oren Peli). Parece que el terror de bajo presupuesto consigue dar, de cuando en cuando, con el resorte adecuado para maximizar una inversión mínima. Carpenter necesitó unos 250.000 euros, Myrick y Sánchez tan sólo 60.000 (eso sí, añadiendo 200.000 más en marketing). Y Peli ha rizado el rizo. Sólo ha necesitado 11.000 euros para reventar la taquilla estadounidense y conseguir siete millones de dólares (cinco millones de euros) en tan sólo 160 salas, con un promedio de más de 33.000 euros por sala (la película que encabezó el ranking el pasado fin de semana).
La película, distribuida al otro lado del Atlántico por Paramount y Dreamworks -esta última compañía se incorporó cuando el mismísimo Spielberg dio su visto bueno después de visionar una copia de trabajo-, se finiquitó en una semana en casa del propio Peli y cuenta la historia de una pareja convencida de tener algo sobrenatural rondando en su apartamento. Para averiguarlo deciden instalar una cámara de visión nocturna, que registre todo lo que suceda en el dormitorio.
Rodada en estilo guerrilla y con grandes dosis de improvisación, la película fue abucheada en el pase de crítica del recientemente celebrado festival de cine de Sitges pero aplaudida a rabiar en su presentación al público. En Estados Unidos, en cambio, todo han sido parabienes para el filme, que ha convencido al 84%, tal y como se puede observar en la web www.rottentomatoes.com, dedicada a recopilar la opinión de los medios del país.
Como todo fenómeno del siglo XXI que se precie, el éxito de Paranormal activity empezó a fraguarse en la Red, con una campaña con todos los tics de El proyecto de la bruja de Blair, incluyendo información que pretendía sugerir que el metraje de la historia era real y había sido suministrado por un contacto no identificado en la policía de San Diego (donde acontecen los hechos). Nadie se tragó la historia, obviamente, pero la mentira interesó lo suficiente como para que los primeros pases de prueba fueran un éxito. Además, el anuncio de que Shutter Island, filme de Martin Scorsese, aplazaba su estreno hasta febrero, obligó finalmente a la distribuidora a adelantar el lanzamiento de la película.
Pocos imaginaban el recibimiento posterior: hasta seis horas de cola para hacerse con una entrada, llenazos en las salas que la exhibían y, sobre todo, decenas de miles de e-mails en respuesta a la promesa de Paramount que aseguraba que si recibía un millón de peticiones estrenaría el filme a escala nacional sin reparar en gastos. El millón ya se ha superado ampliamente y la compañía se prepara para convertir la película en la producción más rentable de la historia del cine. Y todo ello, como es habitual, sin que nadie conozca cuál es la fórmula del éxito ni, claro, cómo repetirla.
La película se estrenará en España de la mano de On-Pictures, el 27 de noviembre, y su director, ahora mismo el tipo más buscado de Hollywood, ya trabaja en su nuevo proyecto: un filme de cinco millones de dólares sobre el Área 51, lugar de peregrinaje de los fans del fenómeno ovni.
Éxito de taquilla extrasensorial 'Paranormal activity',
filme de terror de 11.000 euros, recauda cinco millones en un fin de semana en EE.UU
TONI GARCÍA - Barcelona - 14/10/2009
Primero fue Halloween (1978, John Carpenter), después El proyecto de la bruja de Blair (1999, Daniel Myrick & Eduardo Sánchez) y ahora es el turno de Paranormal activity (2009, Oren Peli). Parece que el terror de bajo presupuesto consigue dar, de cuando en cuando, con el resorte adecuado para maximizar una inversión mínima.
Primero fue Halloween (1978, John Carpenter), después El proyecto de la bruja de Blair (1999, Daniel Myrick & Eduardo Sánchez) y ahora es el turno de Paranormal activity (2009, Oren Peli). Parece que el terror de bajo presupuesto consigue dar, de cuando en cuando, con el resorte adecuado para maximizar una inversión mínima. Carpenter necesitó unos 250.000 euros, Myrick y Sánchez tan sólo 60.000 (eso sí, añadiendo 200.000 más en marketing). Y Peli ha rizado el rizo. Sólo ha necesitado 11.000 euros para reventar la taquilla estadounidense y conseguir siete millones de dólares (cinco millones de euros) en tan sólo 160 salas, con un promedio de más de 33.000 euros por sala (la película que encabezó el ranking el pasado fin de semana).
La película, distribuida al otro lado del Atlántico por Paramount y Dreamworks -esta última compañía se incorporó cuando el mismísimo Spielberg dio su visto bueno después de visionar una copia de trabajo-, se finiquitó en una semana en casa del propio Peli y cuenta la historia de una pareja convencida de tener algo sobrenatural rondando en su apartamento. Para averiguarlo deciden instalar una cámara de visión nocturna, que registre todo lo que suceda en el dormitorio.
Rodada en estilo guerrilla y con grandes dosis de improvisación, la película fue abucheada en el pase de crítica del recientemente celebrado festival de cine de Sitges pero aplaudida a rabiar en su presentación al público. En Estados Unidos, en cambio, todo han sido parabienes para el filme, que ha convencido al 84%, tal y como se puede observar en la web www.rottentomatoes.com, dedicada a recopilar la opinión de los medios del país.
Como todo fenómeno del siglo XXI que se precie, el éxito de Paranormal activity empezó a fraguarse en la Red, con una campaña con todos los tics de El proyecto de la bruja de Blair, incluyendo información que pretendía sugerir que el metraje de la historia era real y había sido suministrado por un contacto no identificado en la policía de San Diego (donde acontecen los hechos). Nadie se tragó la historia, obviamente, pero la mentira interesó lo suficiente como para que los primeros pases de prueba fueran un éxito. Además, el anuncio de que Shutter Island, filme de Martin Scorsese, aplazaba su estreno hasta febrero, obligó finalmente a la distribuidora a adelantar el lanzamiento de la película.
Pocos imaginaban el recibimiento posterior: hasta seis horas de cola para hacerse con una entrada, llenazos en las salas que la exhibían y, sobre todo, decenas de miles de e-mails en respuesta a la promesa de Paramount que aseguraba que si recibía un millón de peticiones estrenaría el filme a escala nacional sin reparar en gastos. El millón ya se ha superado ampliamente y la compañía se prepara para convertir la película en la producción más rentable de la historia del cine. Y todo ello, como es habitual, sin que nadie conozca cuál es la fórmula del éxito ni, claro, cómo repetirla.
La película se estrenará en España de la mano de On-Pictures, el 27 de noviembre, y su director, ahora mismo el tipo más buscado de Hollywood, ya trabaja en su nuevo proyecto: un filme de cinco millones de dólares sobre el Área 51, lugar de peregrinaje de los fans del fenómeno ovni.