Los sindicatos de la Policía Nacional CEP, SUP y SPP pidieron este viernes que no se ceda al chantaje planteado por
ETA, que
ofrece su desarme a cambio de la excarcelación de presos y de la salida del País Vasco de las Fuerzas de Seguridad del Estado y del Ejército.
José María Benito, portavoz del SUP, dijo que, a través de la entrevista publicada por el diario "Gara",
los etarras vienen a confirmar que su decisión de abandonar la violencia está supeditada a conseguir sus objetivos.
Por este motivo, Benito pidió a los partidos políticos que respondan a la banda criminal con unidad y no cediendo ante este chantaje. "Dejar de matar lo tienen que hacer gratis, no tenemos que darles nada a cambio", ha asegurado este portavoz, quien añadió que excarcelar presos "sería un error" que
se pagaría "en el futuro con más muertes". A su vez,
Lorenzo Nebreda, portavoz de la CEP, opinó que lo que los etarras llaman desmilitarización del País Vasco y Navarra es un burdo intento de instalar la impunidad en estas comunidades autónomas. Según Nebreda, lo planteado por los terroristas es un burdo chantaje y una ofensa al sentido común . Además, este representante policial tildó de nauseabundo que los terroristas digan que son conscientes de que su actividad criminal ha generado sufrimiento .
Por último,
José Ángel Fuentes Gago, del SPP, tildó las reivindicaciones de la banda criminal de tonterías a las que no hay que hacer ni caso . A su juicio, no puede ser que un grupo terrorista imponga condiciones ni haga chantaje de ningún tipo.
No hay «tal reflexión», opina la CEP
A su vez, la Confederación Española de Policía (CEP), como organización que representa los intereses profesionales de más de 26.000 funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía en España, también da por "falso que el anuncio de cese de la actividad criminal de ETA responda a una profunda reflexión”, como afirman sus portavoces, sino que, muy al contrario,
es la consecuencia directa de la eficaz labor de las Fuerzas de Seguridad del Estado, que han descabezado sucesivas cúpulas, handesmantelado el aparato de comunicación con sus organizaciones satélites, han abortado sucesivas reorganizaciones de sus colectivos de jóvenes y presos y han logrado desactivar el grupo de abogados que cohesionaba e impartía consignas a los reclusos de la banda. No hay tal reflexión. Hay una enorme debilidad frente a la que ETA se ha resistido hasta el último minuto, con intentos de reorganización de sus estructuras en Francia que se han prolongado hasta este mismo año.
"Sólo la labor del Cuerpo Nacional de Policía, sumada a la de la Guardia Civil, ha permitido a ETA interiorizar la certeza de que ya no cabía otra opción que su disolución". Además, la condición que pone ETA de suprimir agentes en el País Vasco y Navarra responde, a jucio de la CEP, a un "burdo intento de instalar la impunidad" en aquellas Comunidades Autónomas, volviendo a rescatar un proyecto que sólo pretende eliminar testigos incómodos del chantaje y la amenaza y poniendo sobre la mesa un precio que estamos seguros no pagará ningún Gobierno, ni el actual ni el próximo.
Por último, subrayan que "ETA miente una vez más cuando asegura que no pretende tutelar ningún proceso político para, a continuación, repartir tareas y objetivos a los partidos políticos, la sociedad, los Gobiernos o las Fuerzas de Seguridad. Casi cinco décadas de mesianismo asesino hacen creer a la banda terrorista que todavía son un actor de referencia en el seno de la sociedad española". Y acaban pidiendo que el "el único futuro que pueden tener los presos de ETA es el cumplimiento íntegro de sus condenas".
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