21 de noviembre de 2008

Desarticulada una red que concertó más de 600 matrimonios de conveniencia

ELPAÍS.com - Madrid - 21/11/2008

Desarticulada una red que concertó más de 600 matrimonios de conveniencia

Hay 67 arrestados que actuaban en varias provincias.- Cobraban 15.000 euros a nigerianos que se regularizaban casándose con europeos

Una organización que había concertado más de 600 matrimonios de conveniencia entre extranjeros y españoles o comunitarios ha sido desarticulada por la Policía. Hay 67 detenidos desde junio, de los que 18 han sido arrestados en los últimos días en Elche y Alicante en la fase final de la operación. La red falsificaba la documentación en los expedientes para permitir la entrada y permanencia legal en España de nigerianos a los que les cobraba 15.000 euros y buscaba a europeos dispuestos a casarse, que percibían 3.000 euros.
Entre los detenidos están los dos máximos responsables de la red, 15 son de nacionalidad española y el resto nigerianos. Se trata de uno de los grupos más activos en esta modalidad delictiva que había realizado matrimonios fraudulentos en numerosas provincias, principalmente en Alicante, Palma de Mallorca, León, Murcia, Canarias, Orense, Lugo, Ávila, Barcelona o Madrid.
Aumento de solicitudes de residencia
La investigación se inició el pasado mes de junio, al detectar los agentes de Palma de Mallorca un considerable aumento en las presentaciones de solicitudes de residencia de ciudadanos nigerianos. Se acogían al Régimen Comunitario para lo que alegaban estar casados con ciudadanos españoles o comunitarios. Todos ellos habían celebrado sus matrimonios en la iglesia de San Francisco, de la ciudad de Palma de Mallorca, y presentaron un certificado falso del cursillo prematrimonial en una Iglesia de Alcalá de Henares (Madrid).
Posteriormente, la Policía identificó y localizó en Alicante a una persona que participaba en la organización de los enlaces matrimoniales. Entonces se practicaron en esa ciudad una serie de detenciones de personas de nacionalidad española y nigeriana que habían relacionados con la falsificación de documentos y la celebración de los enlaces. Los agentes identificaron en distintas ciudades más, otros matrimonios fraudulentos celebrados entre ciudadanos nigerianos y españoles.
La mayor parte del dinero que se cobraba a los extranjeros, unos 12.000, eran para el organizador, que se encargaba de pagar los gastos de las ceremonias y de las ropas utilizadas; y otros 3.000 para el contrayente español. Incluían los gastos de toda la documentación necesaria para la celebración: certificados de nacimiento, certificados de edad, certificados de soltería y de cursillos prematrimoniales.