Cabrera dice ahora que 'España es aconfesional y la escuela debe serlo'

EL MUNDO – 25/11/08

POLÉMICA POR LA RETIRADA DE CRUCIFIJOS EN LAS ESCUELAS

Cabrera dice ahora que 'España es aconfesional y la escuela debe serlo'

§ Señala la importancia de que los centros educativos cumplan las sentencias judiciales
§ 'Es mucho más importante que centremos nuestra atención en el debate educativo'

La ministra de Cultura, Mercedes Cabrera. (Foto: EFE)
Actualizado martes 25/11/2008 12:23 (CET)

EUROPA PRESS
MADRID.- La ministra de Educación, Política Social y Deporte (Mepsyd), Mercedes Cabrera, ha subrayado el carácter aconfesional del Estado español y la necesidad de que "se respete la naturaleza pública de las escuelas, con la eliminación de cualquier símbolo que pertenezca al ámbito privado", en referencia a la reciente sentencia sobre la retirada de crucifijos en un colegio público de Valladolid.
La ministra ha endurecido su postura, después de que este lunes simplemente asegurara que la autonomía de los colegios debe ser respetada "a la hora de tomar decisiones en esta cuestión o en cualquier otra".
Hoy, en declaraciones al diario ABC, Cabrera reconoce "la realidad católica mayoritaria de España", pero remarca la necesidad de que "la religión se mantenga en el ámbito privado de la vida de las personas, sin interferir en la educación pública", así como recordó que la población actual del país es cada vez "más heterogénea y de múltiples confesiones religiosas".
Asimismo, señaló la importancia de que los centros educativos cumplan las sentencias judiciales que "obligan a todos" y que "garantizan el derecho de los progenitores a decidir sobre la educación de sus hijos". Los padres "tienen derecho a pedir que se retiren los símbolos religiosos y los centros tendrán que cumplirlo, actuando de acuerdo a lo establecido por la Constitución", afirmó la ministra.
Por otra parte, en declaraciones a la Cadena Ser, Cabrera se ha referido a la "tranquilidad" con la que se desarrolla el proceso de aplicación de esta sentencia en las escuelas. "Se está viviendo de manera generalizada y con normalidad, como corresponde a los principios constitucionales", declaró. Además, subrayó que este cambio "no supone una prohibición", por lo que no será "fuente de conflictos".
Finalmente, se impuso a las críticas que acusan al Gobierno de utilizar este asunto para desviar la atención de otros problemas educativos como el fracaso o el abandono escolar. "Es mucho más importante que centremos nuestra atención en el debate educativo que tenemos pendiente y no estar remitiéndonos constantemente al pasado con temas como éste", concluyó.