8 de noviembre de 2010
El PSOE dice que el Papa se equivoca en su crítica al laicismo en España
El PP alega que Ratzinger "no ha sido bien entendido" y arremete contra Zapatero
F. GAREA / M. MORA - Madrid / Barcelona - 08/11/2010
EL PAIS
El Papa ha dejado tras de sí un reguero de polémica política por sus declaraciones sobre el "laicismo agresivo" en España y su comparación con el clima previo a la Guerra Civil. El PSOE, a través de Elena Valenciano, respondió que "el Papa se equivoca gravemente". Y eso que el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, trató de quitar hierro a las declaraciones de Benedicto XVI.
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"El Papa no quiso ser negativo ni polémico", dijo ayer Lombardi. Este defendió que se han "interpretando de forma injusta" las frases de Benedicto XVI en el avión que le trajo a España. "El Papa solo dio una respuesta oral a una pregunta sobre la disminución de la práctica religiosa en Occidente y en España, no hizo un estudio histórico o científico sobre el asunto", explicó. Según Lombardi, "el Papa explicó que esa confrontación o desencuentro entre fe y laicismo existe en Europa y también en España, y sería ridículo negarlo".
Valenciano replicó ayer que "el Gobierno de Zapatero ha tratado mejor a la Iglesia católica que otros gobiernos". Según la dirigente socialista, "la sociedad española se aleja de la cúpula eclesiástica con pasos de gigante, y algo no estarán haciendo bien para que eso ocurra". De las palabras del Papa sobre el papel de la mujer, Valenciano aseguró que "está equivocado sobre la sociedad española y totalmente desactualizado sobre el papel de las mujeres y no entiende su tiempo histórico".
El PP no quiso sumarse oficialmente a las palabras del Papa y el vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons, afirmó que "no ha sido bien entendida" la referencia del Papa al laicismo en España. Pons aprovechó para cargar contra Zapatero por haber viajado a Afganistán y no haber ido a recibir al Papa a Santiago. "Zapatero no ha estado a la altura del sentimiento del pueblo español, pues el Papa es el líder espiritual y afectivo de la gran mayoría de los españoles", dijo. Añadió que lo último que se podía esperar es que "contraprogramase" esta visita, "no solo no recibiéndole a su llegada, sino marchándose de España". Mucho más allá fue el portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja, quien aseguró en Onda Cero que en España se está llevando a cabo un proyecto "laicista radical" que "no tiene parangón en la UE".
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, aseguró que las palabras del Papa le habían sorprendido y que decir que en España "se está viviendo una crisis espiritual como la de los años treinta es, cuando menos, desconcertante. Nos evoca a tiempos que creíamos superados, aunque no olvidados. Tiempos de exaltación católica con consecuencias en la convivencia social".
El diputado de IU, Gaspar Llamazares, dijo que "el viaje ha acabado mal a pesar de la sumisión del Gobierno. Ha hecho concesiones en financiación y en la renuncia a la ley de libertad religiosa". Aseguró que las palabras del Papa son "una injerencia política inaceptable en instituciones democráticas y el Parlamento". Según Llamazares, "la Iglesia aún no ha pedido perdón por apoyar al franquismo, y por eso es más injusto" el comentario del Papa.