1 de julio de 2009
Los obispos vascos reparan "el olvido" de 14 sacerdotes 'rojos' fusilados
EL PAÍS - Bilbao - 01/07/2009
Los obispos vascos reparan "el olvido" de 14 sacerdotes 'rojos' fusilados
La beatificación en 2007 de los mártires católicos de la Guerra Civil española no tuvo en cuenta a 14 curas vascos que también fueron ejecutados por el bando franquista. Los obispos del País Vasco han decidido reparar tal "olvido" y en su recuerdo oficiarán un funeral conjunto el próximo 11 de julio en la catedral Nueva de Vitoria, mientras los datos de la vida y muerte de los sacerdotes "ignorados", como señala la nota oficial de los prelados, figurarán en los registros y libros parroquiales.
Al explicar su iniciativa, los obispos vascos aseguran que quieren "pedir perdón e invitar a perdonar; de ninguna manera pretendemos erigirnos en jueces de los demás, sino reconocer ante Dios nuestras limitaciones en el pasado y en el presente". Eso sí, aclaran que al pedir perdón la Iglesia "se dirige, ante todo, a Dios".
Esta reparación es entendida por los emprendedores del acto como un ejercicio de "purificación de la memoria". Recuerdan que "en la diócesis de Vitoria, la única vasca en 1936, fueron ejecutados por ambos bandos centenares de personas víctimas de odios y venganzas y entre ellas más de setenta sacerdotes y religiosos".
Este recuerdo, que "pretende traer a la memoria a los presbíteros ejecutados por los vencedores y que han sido relegados al silencio", incluye a Martín Lecuona, Gervasio Albizu, José Adarraga, José Ariztimuño Aitzol, José Sagarna, Alejandro Mendicute, José Otano, José Joaquín Arín, Leonardo Guridi, José Marquiegui, José Ignacio Peñagaricano, Celestino Olaindia, Jorge Iturricastillo y Román de San José.
Los obispos vascos reparan "el olvido" de 14 sacerdotes 'rojos' fusilados
La beatificación en 2007 de los mártires católicos de la Guerra Civil española no tuvo en cuenta a 14 curas vascos que también fueron ejecutados por el bando franquista. Los obispos del País Vasco han decidido reparar tal "olvido" y en su recuerdo oficiarán un funeral conjunto el próximo 11 de julio en la catedral Nueva de Vitoria, mientras los datos de la vida y muerte de los sacerdotes "ignorados", como señala la nota oficial de los prelados, figurarán en los registros y libros parroquiales.
Al explicar su iniciativa, los obispos vascos aseguran que quieren "pedir perdón e invitar a perdonar; de ninguna manera pretendemos erigirnos en jueces de los demás, sino reconocer ante Dios nuestras limitaciones en el pasado y en el presente". Eso sí, aclaran que al pedir perdón la Iglesia "se dirige, ante todo, a Dios".
Esta reparación es entendida por los emprendedores del acto como un ejercicio de "purificación de la memoria". Recuerdan que "en la diócesis de Vitoria, la única vasca en 1936, fueron ejecutados por ambos bandos centenares de personas víctimas de odios y venganzas y entre ellas más de setenta sacerdotes y religiosos".
Este recuerdo, que "pretende traer a la memoria a los presbíteros ejecutados por los vencedores y que han sido relegados al silencio", incluye a Martín Lecuona, Gervasio Albizu, José Adarraga, José Ariztimuño Aitzol, José Sagarna, Alejandro Mendicute, José Otano, José Joaquín Arín, Leonardo Guridi, José Marquiegui, José Ignacio Peñagaricano, Celestino Olaindia, Jorge Iturricastillo y Román de San José.