30 de abril de 2008

Critican a la Junta de Extremadura por retirar los crucifijos de un colegio público

ABC - 30/04/08

Critican a la Junta de Extremadura por retirar los crucifijos de un colegio público

PACO VADILLO
MÉRIDA. El Partido Popular de Extremadura ha criticado duramente a la Junta de Extremadura, más concretamente a la Consejería de Educación, por retirar los crucifijos de las aulas del Colegio Público «General Navarro» de Badajoz. Los populares piden respeto para el ejercicio de la libertad religiosa y critican lo que a su juicio es una «falta de tacto» en la retirada de símbolos religiosos del citado centro.
El Secretario del Partido Popular de Extremadura, César Díez Solís, considera «un eslabón más en la larga cadena de faltas de respeto y recortes a la libertad de padres, profesores y alumnos extremeños», los hechos ocurridos en el CEIP «General Navarro» de Badajoz donde, «unilateralmente y sin contar con la opinión preceptiva del Claustro de Profesores y del Consejo Escolar», se han suprimido los crucifijos de todas las aulas del centro escolar.
Solís critica la acción de la junta e ironiza con la situación asegurando que «por lo visto, ese era el problema más importante que tenía ese colegio y, si no lo era, ya lo han creado al tomar una medida que, como mínimo, supone una falta de respeto a las creencias de muchos padres, alumnos y personal docente». Para Díez Solís lo prioritario para la consejería de Educación debe ser el rendimiento educativo de los alumnos de ese colegio público pacense, «para así prevenir los altos índices de fracaso escolar y el abandono prematuro de los estudios».
Ataque a las creencias
Para los populares esta acción se ha realizado «con nocturnidad, alevosía y falta de tacto». Desde el PP recuerdan que más del 92 por ciento de los alumnos de los centros educativos en el ámbito territorial de Badajoz-Mérida están matriculados en la asignatura de Religión Católica «y existen otras medidas para conjugar el principio de libertad religiosa con la retirada de símbolos religiosos, sin que esto suponga un ataque a las creencias de los extremeños».
César Díez Solís asegura que la consejería de Educación no ha pulsado la opinión de los profesores del colegio, de las madres y de los padres. Para el líder popular el respeto a los colectivos cívicos «se ha visto conculcado al no haber sometido esta medida drástica a la consideración del Claustro de Profesores y al Consejo Escolar». Exigen que para llevar a cabo una medida como ésta «lo mínimo era que se hubiera elaborado un protocolo de actuación para proceder a una retirada respetuosa».
El PP cree que se debería haber respetado las normas por parte de la Consejería quien a su juicio deberían haber intentado llegar a acuerdos con los padres y profesores, «consensuar estos asuntos inmersos en las creencias personales y no enojar y crispar a los ciudadanos que confían en que los colegios públicos tengan como misión básica la educación de sus hijos».
El PP rechaza la actuación de la consejería de Educación en este asunto, reiterando que no se ha mediado ante los órganos colegiados, «que son los auténticos órganos de deliberación y decisión». Díez Solís ha exigido responsabilidades políticas y ha pedido a la Junta que aclare «la desconsideración» efectuada en el CEIP de Badajoz «a las creencias de muchos extremeños».