22 de junio de 2011

Vizcaya ahora se llama Bizkaia

Vizcaya ahora se llama Bizkaia

El Senado acuerda por 130 votos a favor y 110 en contra cambiar los nombres de las tres provincias vascas por Araba/ Álava, Guipuzkoa y Bizkaia

 Madrid 22 JUN 2011 - 14:29 CET

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El Senado ha aprobado esta mañana cambiar los nombres de las tres provincias vascas, que pasarán a llamarse Araba/ Álava, Guipuzkoa y Bizkaia, algo que ya se había debatido en el Congreso.
La decisión ha salido adelante con 130 votos a favor y 110 en contra. El PP, que calificó la proposición de "ocurrencia", presentó cinco enmiendas que el senador Ramón Rabanera defendió sin mucha convicción: "Es misión imposible convencer a sus señorías", dijo. Las enmiendas fueron, en efecto, rechazadas.
El senador peneuvista Iñaki Anasagasti, en el turno en contra, ha recordado al popular que su nombre "es Rabanera con b, que es una grafía vasca, y no le gustaría que se la cambiaran. Usted es Rabanera con b y no Mayor Oreja", ha dicho. Anasagasti ha pedido al PP "que no dramatice" y ha defendido el cambio de denominación "como algo absolutamente normal" y que ya se había hecho antes, por ejemplo al cambiar el nombre de La Coruña por A Coruña. ¿Por qué en Galicia o Cataluña se puede cambiar el nombre y en el País Vasco no? se ha preguntado.
La senadora socialista Lentxu Rubial ha recordado que en Girona, Lleida y A Coruña se produjeron estos cambios y que todos los territorios tienen los mismos derechos.
Por el grupo mixto, el senador José María Mur, que intervenía por última vez en el Senado, ha declarado: "No va a pasar nada por cambiar el nombre y la guerra de las lenguas debería ir aplacándose".
La senadora de CiU Coralí Cunyat ha declarado: "Yo soy de Girona y no pasa nada por que se llame así, ni tampoco por decir Lleida. Mi grupo va a votar a favor por una razón de normalidad lingüística".
Por parte de la Entesa, el senador Rafel Bruguera ha opinado: "Lo excepcional es que este asunto no se haya resuelto este tema hace 18 años.  Lo que se hace es adaptar la denominación de las provincias a lo que en su momento acordaron democráticamente los territorios forales. Es una cosa de absoluta normalidad".  

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