Bautizo en el Vaticano de los mellizos de Luis Alfonso de Borbón
Los pequeños recibieron los nombres de Luis y Alfonso en una ceremonia de caracter privado.
EFE - Roma - 06/09/2010
Los hijos mellizos de Luis Alfonso de Borbón y de su esposa venezolana, Margarita Vargas, fueron bautizados hoy en la Capilla del Coro en la Basílica de San Pedro del Vaticano, ha informado la familia a través de un comunicado.
Luis y Alfonso, como han sido bautizados los mellizos respectivamente, son calificados en el comunicado como "hijos del heredero de los derechos dinásticos de los franceses". Y recibieron las aguas bautismales "en una ceremonia de carácter íntima y privada, aunque con todos los honores que corresponden al duque de Anjou", añade la nota oficial.
El cardenal Angelo Comatri, arzobispo de la Basílica de San Pedro y vicario general de su Santidad en la ciudad del Vaticano, ofició la ceremonia celebrada en la capilla amueblada por Bernini, mientras que monseñor Nicolas Thevenin, prelado de antecámara de Benedicto XVI, leyó la bendición apostólica, refiere.
Ejercieron de padrinos de Luis, la tía de Luis Alfonso, Arancha Martínz-Bordíu y Francisco D'Agostino, cuñado de los padres.
Por su parte, Alfonso fue apadrinado por Amparo Corell de Trenor, baronesa de Alacuas, persona muy próxima a Luis Alfonso, y Lorenzo Perales, amigo íntimo de los padres.
"Luis y Alfonso que llevan nombres vinculados a la familia, fueron inscritos en el registro Vaticano como altezas reales y duques de Borgoña y de Berri respectivamente, de acuerdo con las antiguas tradiciones francesas", explica el comunicado.
Los mellizos, que nacieron el 28 de mayo de 2010 en Nueva York, donde residen sus padres, vistieron trajes de cristianar que pertenecieron a su abuelo, el duque de Cádiz, y que también lucieron sus hijos Francisco, fallecido en accidente de tráfico en 1984, y Luis Alfonso, actual duque de Anjou, agrega el comunicado.
Los duques de Anjou tienen otra hija mayor, Eugenia, quien fue bautizada el 2 de junio de 2007 en la Nunciatura Apostólica de París, donde también fue inscrita como alteza real y princesa.
A la ceremonia asistió, entre otros, la duquesa de Franco, bisabuela de los mellizos y la abuela, Carmen Martínez Bordiú con su marido José Campos.