25 de marzo de 2018
Puigdemont, detenido en Alemania tras entrar en coche desde Dinamarca
Puigdemont, detenido en Alemania tras entrar en
coche desde Dinamarca
El expresidente
catalán ha sido interceptado a 30 kilómetros de la frontera tras activarse la
orden de detención europea contra él. Ha sido internado en la prisión de
Neumünster
Berlín 25 MAR 2018 - 17:06 BRT
El
expresidente catalán Carles Puigdemont antes de pronunciar una conferencia en
la Universidad de Helsinki, el pasado día 23. JUANJO
GALÁN (EFE) / ATLAS
A las 11.19 de la mañana del domingo, la fuga europea de Carles
Puigdemont se truncó. Policías alemanes
detuvieron al ex presidente de la Generalitat en al norte del
país, casi en la frontera con Dinamarca. “Se encuentra bajo custodia policial”,
confirmaba a este diario un portavoz de la policía regional de Schleswig
Holstein. La del domingo fue una operación conjunta de las policías
de Alemania y España y del CNI. La decisión queda ahora en manos de
la justicia de ese Estado federado, que tiene 60 días para pronunciarse sobre
la tramitación de la euroorden, según explicaron fuentes del ministerio de
Justicia alemán.
El código penal de este país -artículos 81,82 y 83- establece el delito
de “alta traición” contra el Estado y el orden constitucional, penados con
penas de cárcel y hasta de cadena perpetua, lo que supondría un máximo de 25
años en prisión.
El ex presidente de la Generalitat, fue detenido a las altura de las
localidades de Schuby y Jagel, en las inmediaciones de la autopista A7. El
arresto se produjo en una gasolinera y el detenido fue trasladado en torno a
las tres de la tarde a la prisión de Neumünster, al norte de Hamburgo y también
en el Estado de Schleswig Holstein, según detalló la prensa alemana, sin
que hubiera confirmación oficial. Durante la operación han estado
presentes agentes del CNI, informa Óscar López Fonseca.
Los servicios de inteligencia españoles han seguido todo el periplo de
Puigdemont desde el viernes hasta esta mañana y han resaltado "la
excelente colaboración" de las autoridades alemanas en este tema, según
fuentes policiales. Fuentes de la Seguridad del Estado aseguraron que en un
primer momento se barajó su arresto en Dinamarca. Sin embargo, se descartó el
hacerlo al tener el convencimiento de que el ex presidente iba a seguir su
periplo por tierra en Alemania. La estrecha cooperación entre España y Alemania
y la inclusión explícita de un delito similar al de rebelión en el código
penal, complica el futuro del ex presidente de la Generalitat.
El vice fiscal general en Schleswig Holstein, Ralph Döpper, confirmó a
la agencia alemana de noticias que la decisión acerca de si el ex presidente
será entregado en detención para ser extraditado se tomaría “con cierta
probabilidad solo mañana”, en palabras de Döpper. Está previsto que Puigdemont comparezca
mañana ante el juez, que simplemente verificará su identidad.
“Estamos solo al comienzo de nuestra investigación”, añadió. La corte analizará
el caso “de acuerdo con los documentos que presenten las autoridades españolas
que deben contemplar las razones para la extradición y la legalidad de la
entrega”.
En el ministerio de Justicia alemán confirman que la base legal
aplicable en este caso son los procedimientos de entrega entre estados Miembros
relativos a la orden de detención europea. En Alemania, la media de duración
del procedimiento de la euroorden es de 15,15 días para los casos en los que el
detenido acepte la entrega y de 41,74 días cuando se oponga a ella, según las
últimas cifras que aporta la Comisión europea relativas a 2015. El tope legal
es de 60 días prorrogables a 90. Esos mismos datos indican que ese año Alemania
detuvo a 1.635 personas y que de ellos, 1.283 fueron entregados al país que
emitió la orden europea de detención. Preguntado, el ministerio alemán no
ofreció datos sobre cuántas de esas entregas se produjeron con España.
Sí detallaron que el detenido debía comparecer ante el juez
en 24 horas, tras las cuales se decidirá si Puigdemont continúa
detenido mientras se procesa la orden de extradición. Después, será el tribunal
superior regional de Schleswig Holstein, al norte de Alemania, el competente
para decidir sobre la entrega.
El artículo 81 del código penal alemán establece la pena máxima y a partir
de diez años para “quien intente con violencia o bajo amenaza de violencia
perjudicar la continuación de la existencia de la República Federal alemana o
cambar el orden constitucional, basado en la Constitución alemana”. Más
adelante, el artículo 83 fija penas de entre uno y diez años para la
“preparación de una operación de alta traición”.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario