Bruselas
reprocha a España su falta de compromiso en la acogida de refugiados
El Gobierno español no se ha traído
ni a uno solo desde los 18 que acogió a finales de 2015
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EL PAIS - CLAUDI PÉREZ
Inmigrantes y
refugiados guardan cola para una taza de te en un campo de Idomeni, en la
frontera entre Grecia y Macedonia. STOYAN NENOV Reuters
Los datos cuentan historias. Y los que hoy presentará la Comisión
Europea -en un informe al que ha tenido acceso EL PAÍS- cuentan una fea
historia sobre España:el Gobierno español se comprometió a reubicar (desde
Grecia e Italia) y reasentar (directamente desde Turquía) a 467 refugiados
antes de acabar marzo. Bruselas anuncia hoy que España
no se ha traído ni a un solo refugiado desde los 18 que acogió a finales de
2015. Son cero sobre la última promesa de 467, cuando han pasado ya casi dos
semanas desde la fecha límite de ese compromiso. Bruselas critica duramente esa
política, según fuentes comunitarias, y atribuye los pésimos números de España
a la falta de voluntad del Gobierno. Consultado por este periódico, fuentes del
Ejecutivo aseguran que se han cursado ya todas las peticiones, y de momento no
hay respuesta. España pretende traerse a 32 refugiados de Italia, pero el
Ejecutivo transalpino no se ha movido durante semanas. También a 150 de Grecia:
el Ejecutivo tiene ya en sus manos 138 expedientes de refugiados y está
haciendo los controles de seguridad pertinentes. Y se comprometió a reasentar
285 de Turquía: el Gobierno insiste en que ha reclamado una y otra vez a Acnur
(la agencia de la ONU) que empiece a tramitar los expedientes, sin suerte,
siempre según las fuentes consultadas en Exteriores.
LUCÍA ABELLÁN
Los
compromisos de repartir por toda Europa a los refugiados llegados a Grecia e
Italia, así como de acoger directamente a otro cupo de demandantes de asilo
desde terceros países, apenas se han cumplido. Tras meses de tensiones, la
Unión Europea acordó a finales del pasado septiembre redistribuir a 160.000
personas -una mínima parte del millón largo llegado a suelo europeo en- entre
todos los socios. El resultado es muy insatisfactorio: solo se ha reubicado a
1.145 personas. Y el objetivo de 160.000 debería estar cumplido en dos años.
Algo mejor
progresa el reasentamiento desde países con fuerte presencia de refugiados
(básicamente los vecinos de Siria). La UE ha acogido a 5.677 personas en los
últimos meses, del cupo de 22.504 que se había asignado.
Todas
estas cifras se han visto sacudidas con el acuerdo de expulsión de refugiados y
migrantes entre la UE y Turquía. Como ya llegan muchos menos extranjeros a
Europa por la ruta del Egeo, la UE ha propuesto convertir 54.000 plazas de
reubicación -desde Grecia e Italia a otros Estados- que estaban sin asignar
también en reasentemientos directos desde Turquía. A ese número se les suman
los 18.000 que aún no se habían desplazado desde terceros países cuando se
firmó el acuerdo. El resultado es que Europa se compromete a traer desde
Turquía al menos a 72.000 refugiados mientras dura el pacto de expulsiones. Una
vez sellada la ruta, el club comunitario promete -pero ya sin cifras sobre la
mesa- acoger a muchos más. El objetivo es mostrar que el viaje legal y seguro
hacia Europa es más eficaz para los demandantes de asilo que arriesgar su vida
en el mar.
La cruda realidad es que en algo más de seis meses España se ha traído a
18 refugiados desde Italia, a pesar de las promesas del ministro del Interior, Jorge
Fernández Díaz, y del
titular de Exteriores, José Manuel García-Margallo. Ni uno solo de Grecia y ni un
solo reasentamiento desde Turquía o Líbano. Nada más. Hay pocos países con
peores números. Portugal, con cuatro veces menos población que España, acoge a
181. Países que no forman parte de la UE, como Suiza, Liechtenstein, Suiza o
Islandia, han acogido a muchos más desde Turquía. Solo el bloque del Este
presenta peores números: Croacia, Hungría, Polonia, Eslovaquia y Eslovenia no
han acogido a un solo refugiado –Bulgaria solo a dos--, pese a que sus jefes de
Estado o primeros ministros se comprometieron a hacer funcionar ese mecanismo
voluntario. Hay otros países con números muy bajos, pero son mucho más pequeños
que España: Chipre (6), Letonia (6), Lituania (6), Estonia (7).
Esas cifras corresponden al segundo informe de la Comisión sobre
reubicación y reasentamiento, que confirma que el compromiso de los Veintiocho ha mejorado ligeramente tras el acuerdo con Turquía, pero la velocidad a la que los socios acogen a los refugiados sigue
siendo decepcionante. Eso sí: desde el 16 de marzo han caído a plomo las
llegadas a Grecia (9.928 personas), aunque a cambio llega más gente a Italia
(8.564 desde mediados de marzo).
Bruselas apunta que con el cierre con las fronteras
con Macedonia siguen en suelo griego entre 50.000 y 56.000 personas, según los
datos de Acnur: un polvorín. Un tercio de esa gente procede de países no elegibles para la
reubicación.
“Los
progresos no son satisfactorios”, señala la Comisión en el informe. Bruselas
señala que, como en el caso español, desde el primer informe de mediados de
marzo había compromisos por parte de los Estados miembros para acoger a al
menos 6.000 refugiados. “Ese objetivo no se ha cumplido”, asegura el informe.
Solo se ha acogido a 163 personas desde Grecia e Italia; en el caso de Turquía
las cifras son mejores: 5.677 personas de las 22.504 acordadas, 79 de ellas
desde que se activó el acuerdo con Ankara, el 4 de abril. “La Comisión urge a
los Estados miembros a incrementar dramáticamente sus esfuerzos para responder
a la situación humanitaria en Grecia y prevenir el deterioro de la situación en
Italia”, asegura el documento, que subraya la posibilidad de que el Ejecutivo
comunitario “tome medidas” si los Estados miembros “no cumplen sus
obligaciones”. Bruselas ha hecho continuos llamamientos a acelerar ese proceso:
los socios, empezando por los del Este y España, hacen oídos sordos.
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