GABRIEL SANZ Ese exdirigente pertenece a un sector que contribuyó decisivamente a la elección de Alfredo Pérez Rubalcaba en el 38 Congreso, para dar un giro de 180 grados y evitar el riesgo de la continuidad del «zapaterismo» en la persona de Carme Chacón.Alarma en el sector moderado del PSOE por el giro radical a la izquierda
Día 13/04/2013 - 19.31h
«Parecemos el 15-M», alertan veteranos socialistas, temerosos de ahuyentar a las clases medias que dan la mayoría en España
«El PSOE parece hoy el 15-M», resumía ayer un exdirigente, alarmado por la deriva hacia las tesis de Izquierda Unida (IU) en materia económica, tras asumir como propio un «problema de ubicación» del PSC proponiendo, en plena crisis institucional, una reforma constitucional para ir hacia un Estado Federal.
Ese ex dirigente pertenece a un sector que contribuyó decisivamente a la elección de Alfredo Pérez Rubalcaba en el 38 Congreso, para dar un giro de 180 grados y evitar el riesgo de la continuidad del «zapaterismo» en la persona de Carme Chacón. Hoy, varias personalidades de ese sector consultadas por ABC, hablan de «huida» hacia la izquierda por no contradecir el pacto en Andalucía. Tiene ademas un único objetivo: frenar la sangría que las encuestas vienen pronosticando a favor de IU.
Se intenta extender a toda España la expropiación temporal de vivienda a los bancos en Andalucía, critican; se muestra tibieza en la condena al acoso al PP –Felipe González fue mucho más lejos:«¿Un niño tiene que aguantar presión a la puerta de su casa?»–; y se alienta el debate monarquía-república –«soy republicano», recordaba anteanoche Rubalcaba en TVE– con propuestas «imposibles» en la futura Ley de Transparencia .
Todo ello en un momento de crisis de la Corona sin precedentes, resaltan estas fuentes, que recuerdan que Joaquín Almunia desarrolló una estrategia parecida con la IU de Francisco Frutos, el cual concluyó en un acuerdo preelectoral en los comicios de 2000 que acabó convirtiendo la mayoría relativa de la primera legislatura de José María Aznar en absoluta.
La muestra más palpable de malestar la protagonizó este jueves el expresidente del PSOE Manuel Chaves en el Congreso, encarándose con Odón Elorza que, junto a otros diputados, se estaba sumando a la algarada de los preferentistas contra el PP: «Pero ¿Tu sabes en qué partido estas?». Alfonso Guerra diría luego: «Pregunten a los que aplaudían».
Muchos recuerdan la alerta que lanzó el ex presidente González durante acto en diciembre: «El PSOE ha perdido la vocación de mayoría», y creen que con las actuales políticas, discursos y gestos, no recuperará nunca 76 escaños de diferencia con el PP porque ahuyenta a las clases medias.
Este mediodía, Rubalcaba presentará en Badajoz una propuesta de reforma fiscal cuya medida estrella será la eliminación del actual IRPF y del impuesto de Patrimonio para crear una nueva figura, todavía sin nombre, pero que fuentes socialistas bautizaban ayer como«impuesto sobre la riqueza».
Aseguran que no se aumentarán los tipos de IRPF, porque penaliza a los que tienen nómina, sino que se pretende aflorar riqueza de sociedades patrimoniales y SICAV. Además, se quiere eliminar deducciones del impuesto de sociedades para que las grandes empresas acaben pagando un 15% real, en lugar del 7% actual, e imponer un impuesto sobre el pasivo de los bancos y sus depósitos, y otro sobre los bonus de los directivos.
«No van a votarnos»
«Sabemos que no van a votarnos los destinatarios de todas estas medidas», reconocían las mismas fuentes, pero de lo que se trata es de que la presión fiscal pase del actual 32,4% en España al 40% de media de la UE en diez años a costa de los ricos, «porque el problema de España no es gasto, es el ingresos». Se trata de recaudar 40.000 millones más de los ricos en cuatro años.
Una de las propuestas que, sin duda, traerá polémica es que los padres que envíen a sus hijos a colegio privado no concertado comenzarán a pagar IVA por ello. Eso sí, no está decidido porque depende de directivas europeas.
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