12 de febrero de 2013
Cinco edificaciones históricas tristemente desaparecidas en España
Día 12/02/2013 - 10.07h
En nuestro recorrido diario por los temas más curiosos de la blogosfera hoy destacamos una entrada del blog «Curiosos incompletos» que nos ofrece un recorrido por algunas edificaciones singulares de España que desaparecieron a causa de incendios, por culpa de la guerra o, simplemente, debajo de la piqueta.
Esta torre madrileña fue diseñada por el arquitecto Miguel Fisac en 1965 y destacaba por sus características formas. Sede de los laboratorios Jorba, se encontraba situada entre las calles de Josefa Valcárcel y Arturo Soria. La presión urbanística que soportó la zona en las dos últimas décadas del pasado siglo llevó a sus propietarios a derribarlo y construir un edificio de oficinas que ocupara una superficie mayor. A pesar del valor arquitectónico de la construcción y de las protestas de los vecinos, entre el 1 y el 4 de agosto de 1999, la Pagoda fue víctima de la piqueta.
La antigua residencia de los Reyes de Valencia, conocida también como el Palacio de las 300 llaves, en alusión al número de habitaciones que llegó a tener, fue demolido el 12 de marzo de 1810, en plena Guerra de Independencia. Las crónicas cuentan que la destrucción obedeció a una estrategia militar que pretendía impedir que se convirtiera en un bastión en el que las tropas napoleónicas pudieran hacerse fuertes y bombardear la ciudad. Por caprichos de la historia, finalmente los franceses atacaron por otro flanco y tomaron la ciudad sin luchar, ya que las tropas españolas se replegaron hacia Alicante.
La antigua residencia de los Reyes de España ardió por completo en un pavoroso incendio declarado en la Nochebuena de 1734, mientras los miembros de la corte se encontraban en el Palacio de El Pardo. El fuego tardó tres días en ser extinguido y destruyó muchos de los tesoros artísticos que albergaba el edificio. Algunos, como Las Meninas de Velázquez pudieron ser rescatados a tiempo, mientras que otros se salvaron gracias a que habían sido trasladados al Palacio del Buen Retiro. En 1738, Felipe V ordenó la construcción del actual Palacio Real de Madrid en el mismo lugar que ocupaba el Alcázar.
Fue uno de los edificios que el arquitecto Luis Domenech Montaner construyó para la Exposición Universal de 1888 de Barcelona. El edificio, de 5.000 metros cuadrados, se construyó en el tiempo récord de 53 días. Se concibió como una instalación temporal para acoger a los visitantes de la exposición. A pesar de que la estructura gustó mucho entre la población de Barcelona, el propietario del terreno ubicado en el Puerto de la ciudad, no permitió que se conservara y fue derribado al término de la exposición
En 1910 ocupaba lo que hoy es el Parque de la Ciudadela, el Palacio Arzobispal de Alcalá de Henares, el Teatro Romano de Sagunto, el Palacio de Sanchez Dalp y el Gran Hotel de París de Sevilla o La plaza de las Descalzas y el Hotel Florida de Madrid son otras de las construcciones desaparecidas que completan esta curiosa lista.
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