La Ley Wert, más cara
El ministerio quintuplica el coste de aplicación en la nueva memoria económica
El Estado deberá pagar más de 400 millones en tres años
Educación teme que se pueda retrasar su implantación un curso
El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert. / EFE
La Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa, la llamada Ley Wert, costará más de lo previsto y puede que se implante más tarde. El Ministerio de Educación ha presentado hoy a las comunidades autónomas una nueva memoria económica que quintuplica el coste de aplicación de la reforma hasta 408 millones de euros de costes directos. Según la propuesta del Ministerio, las comunidades autónomas deberán asumir el gasto de mejorar el abandono escolar. El incremento paulatino de los estudiantes de Formación Profesional y del regreso a las aulas de los alumnos que antes dejaban el sistema lo sufragarán las regiones. Educación estima una horquilla de 150 a 925 millones de euros por año en función del éxito de la implantación. Las negociaciones pueden retrasar la implantación un año más hasta el curso 2015-2016, aunque la intención del Ministerio es comenzar el curso que viene.
¿Por qué se multiplican por cinco los costes? El Ministerio lo atribuye a tres factores. La implantación de dos itinerarios en 4º ESO (hacia FP o Bachillerato) tendrá un impacto mayor en las comunidades con más dispersión de alumnos en escuelas rurales, como las han hecho notar algunas regiones en las reuniones sectoriales. La secretaria de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, Montserrat Gomendio, ha explicado que también contribuye que la nueva FP básica durará dos años.
También esperan ahorrar menos en profesores en la “compactación” de asignaturas de Bachillerato. El borrador de la ley fue modificado para que las comunidades y los centros educativos tuvieran más autonomía para decidir qué asignaturas y qué carga lectiva asumen, por lo que el Gobierno prevé que los cambios se harán de forma más gradual. Además, suman el coste de las evaluaciones de segundo o tercero de primaria (1,5 millones de euros) o la final de ESO (2,3 millones). La previsión del Ministerio es que la implantación -medida en tres años naturales pero en dos cursos académicos- suponga 23 millones el primer año, 130 millones el segundo y 255 el tercero.
Los llamados costes indirectos, que en principio deben asumir las comunidades autónomas, comenzarán a pagarse a partir del cuarto año. El Ministerio de Educación estima que a partir de ese curso, con las reformas ya en marcha, aumentará el porcentaje de alumnos de Formación Profesional y se rebajará la tasa de abandono educativo temprano, los alumnos que no terminan la educación obligatoria. Actualmente se sitúa en el 26%. El ministerio quiere una reducción “drástica” de ese abandono pero carga el coste sobre las comunidades autónomas.
El Ministerio dibuja tres escenarios distintos. Uno de éxito moderado, en el que se reduzca un 6% el abandono escolar, que costaría 150 millones de euros. Otro intermedio, que supone reducir el índice un 11%, valorado en 332 millones y un tercer escenario, el más optimista, que supondría reducir el abandono por debajo del 7% hasta 927 millones. El Ministerio se reúne el próximo 7 de febrero con las comunidades en una nueva mesa sectorial para debatir sobre la memoria económica.
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