29 de mayo de 2018
Una boda real... sin reyes
De las más de cincuenta bodas reales a las que he asistido como periodista, ésta del príncipe Harry con la mestiza afroamericana Meghan Markle es la primera que se celebra sin la presencia de miembros de Familias Reales a ningún nivel. Sólo la reina Isabel, abuela del novio. Y por parte de la novia, su madre que sola llegó y sola permaneció durante la ceremonia de la boda de su hija.
¡Quién le iba a decir a la reina Isabel que, a sus 92 años, iba a ser testigo de la boda más surrealista de todas las celebradas durante su reinado, después de haber vivido y sufrido cuatro divorcios de cinco matrimonios: la de su hermana Margarita y la de sus hijos Carlos, Ana, Andrés y Eduardo!
¡Quién le iba a decir a la reina más reina del mundo y a todos los reyes europeos, incluyendo a Juan Carlos, que sus hijos y en este caso, nieto, se casarían no sólo con plebeyas y divorciadas sino con mestizas! Dicen que estos matrimonios modernizan las monarquías, acercándolas al pueblo cuando, en realidad, se vulgarizan. Esta vulgarización comenzó en el Reino Unido, en 1960, con la boda de su hermana Margarita con el fotógrafo Tony Arstrong-Jones. Continuó con el de su hija Ana con el profesor de equitación Mark Phillips, y las de sus hijos Andrés con Sarah Ferguson ("tengo mucho por delante y lo suficiente por detrás para hacer feliz a un hombre") y Carlos con Diana ("en mi matrimonio no podemos ser tres").
Con todos estos antecedentes, la reina decidió autorizar esta boda pero no en Westminster ni en Buckingham sino en Windsor, donde se celebró la de Carlos con Camilla.
Conocedora Su Graciosa Majestad de la endogamia que rige, todavía, en la mayoría de las Familias Reales, para evitar desaires decidió que no se cursaran invitaciones. Ni siquiera a aquellos relacionados con ella por lazos familiares. Como los reyes españoles y que la boda "real" fuera todo lo interracial que los novios querían pero de bajo nivel.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario