Los presupuestos de la Comunidad de Madrid para el año que viene están congelados. Ni un euro más ni uno menos. Excepto en partidas sociales como la sanidad, que consigue 44 millones más que en 2011 (pasa de 7.125 millones a 7.169), tal y como la presidenta, Esperanza Aguirre, destacó esta semana cuando presentó las nuevas cuentas regionales. La cifra global queda casi igual, pero no el reparto: gana la sanidad de gestión privada; pierde la pública. El incremento del presupuesto sanitario es de apenas un 0,6%, lo que quiere decir que, teniendo en cuenta la inflación, en realidad es un descenso. Sin embargo, hay una partida que destaca por encima de cualquier otra: crece nada menos que un 34% el dinero que se destina a pagar la asistencia sanitaria concertada.
El año próximo la región tendrá cuatro hospitales de gestión privada
Valdemoro fue el primer centro que abrió según el 'modelo Alzira'
Se trata del llamado "artículo 25" del Programa 750, Atención Especializada, que se inscribe en los gastos del Servicio Madrileño de Salud (Sermas). La "asistencia sanitaria y servicios sociales con medios ajenos" pasa de los 371 millones de euros de este año a 496 para el que viene. Un incremento inaudito entre el resto de apuntes presupuestarios del programa, cuya dotación total es de 1.287 millones de euros. Una parte de esta subida corresponde al recientemente inaugurado hospital de Torrejón de Ardoz, un centro de propiedad y gestión privadas al que la Administración paga por la asistencia que presta.
El hospital de Torrejón costará 76 millones de euros el año que viene. El centro empezó a funcionar en septiembre de este año; en los presupuestos de 2011 se le destinan 26,9 millones. Este hospital se ha construido mediante una concesión administrativa, es decir, supone la cesión de la construcción, gestión y provisión privadas de la asistencia sanitaria a la unión temporal de empresas -formada por Ribera Salud, Asisa y FCC, la única que se presentó al concurso- que consiguió la concesión por 30 años y 2.127 millones de euros. La Consejería de Sanidad pagará 571,5 euros al año por cada paciente que atienda (tiene 133.000 asignados).
El incremento de un 34% en los pagos a proveedores, o "medios ajenos", como los denomina el Presupuesto, no hace sino avanzar en la progresiva privatización de la asistencia sanitaria en Madrid. Cada vez más, la gestión de la sanidad pública está en manos de empresas. En cambio, los hospitales tradicionales, los de gestión directa, pierden recursos año tras año. Hace dos años se produjo un descenso de las plantillas. Según los presupuestos de 2010, el 80% de ellos contaban con menos personal sanitario que el año anterior. Un análisis detallado, centro por centro, de la financiación que tendrán en 2012 permite comprobar que los hospitales tradicionales son los que ven reducido su presupuesto. La mayoría, a excepción del Gregorio Marañón y su Instituto de Cardiología, el hospital de El Escorial y las empresas públicas del hospital de Fuenlabrada y la Fundación Hospital Alcorcón, contarán con menos dinero para funcionar.
La mayor caída del presupuesto es la del hospital Virgen de la Torre, que dispondrá de un 19% menos de financiación. Se trata de un centro de apoyo, como Santa Cristina y la Cruz Roja, que también sufren recortes el año que viene. El hospital Príncipe de Asturias, en Alcalá de Henares, ve reducido su presupuesto casi un 7%. Las caídas en las cuentas de los grandes hospitales, los que cuentan con más de 1.000 camas, rondan el 1% o el 2%. El hospital infantil Niño Jesús pierde algo más de un millón de euros, lo que equivale al 2,2% de los recursos con los que ha contado este año.
El incremento de más de un tercio en el presupuesto destinado a pagar los servicios que prestan empresas privadas en 2012 no es una decisión aislada en la política sanitaria de Esperanza Aguirre. El panorama de la sanidad pública ha cambiado radicalmente en los algo más de ocho años que lleva al frente de la Comunidad de Madrid. A su llegada, encontró una veintena de hospitales de gestión directa. Ahora, uno de cada cuatro son de gestión privada, total o parcialmente. Ese cambio de modelo lleva años notándose en los presupuestos. Las últimas cuentas liquidadas, las de 2010, permiten comprobar que los gastos destinados a financiar la asistencia concertada suponen ya el 17,3% del presupuesto del Servicio Madrileño de Salud (Sermas).
Para ver cómo ha evolucionado el peso de la sanidad pública en manos privadas no hay más que retroceder cuatro ejercicios. En 2007, la asistencia concertada suponía el 9,6% de lo que gestionaba el Sermas. Es decir, en apenas cuatro años prácticamente se ha duplicado el peso de este modelo en el gasto total en prestación sanitaria del Gobierno de Esperanza Aguirre. La última memoria anual del Sermas, con datos de 2010 y recientemente publicada, destaca esta progresión cuando habla del Capítulo 2, bienes corrientes y servicios. "Las obligaciones reconocidas [...] suponen un 36,14% del total [...] mostrando una evolución especialmente significativa en los gastos destinados a financiar la asistencia concertada". La propia memoria justifica el aumento de esta partida por la presencia de los nuevos hospitales.
El modelo sanitario de Aguirre sigue reforzándose. A la reciente inauguración del hospital de Torrejón de Ardoz se unirán el año que viene las aperturas de otros dos centros que también funcionan como concesiones administrativas, el segundo hospital de Móstoles y el de Collado Villalba, lo que permite a la Administración madrileña desentenderse de la gestión directa. Con estos serán cuatro los hospitales de gestión enteramente privada en la región. El primero fue Valdemoro, que abrió sus puertas en 2007 e inauguró en Madrid el llamado modelo Alzira, así llamado porque este municipio valenciano inauguró en 1999 el primer centro público de atención sanitaria especializada gestionado por una empresa bajo concesión administrativa, la misma fórmula que se usa para las autopistas de peaje.
Estos dos nuevos hospitales también tienen su correspondiente partida presupuestaria. El de Móstoles costará 71,4 millones el año que viene, mientras que el de Collado Villalba supondrá 21,9 millones.
El Gobierno de Aguirre prevé hacer inversiones en atención especializada por valor de 59,7 millones de euros en 2012. Los presupuestos detallan varias actuaciones en infraestructuras sanitarias: la reforma y ampliación del hospital Santa Cristina (9,5 millones) y la continuación de las reformas en el hospital Clínico (9,6 millones) son las que se llevan la mayor parte. La central de instalaciones 12 de Octubre costará 4,5 millones, mientras que las mejoras en el hospital de El Escorial supondrán 1,4 millones de euros. El hospital de la Cruz Roja está modernizando sus instalaciones. La reforma del edificio de Reina Victoria, 24 costará 260.000 euros.
En el apartado de inversiones también figuran las compras de tecnología. La partida más elevada corresponde a cinco resonancias para diferentes hospitales (4,2 millones de euros). Otra de las inversiones más cuantiosas es la construcción del centro de especialidades Virgen del Val, en Alcalá de Henares.
La Comunidad tiene previsto destinar 54,6 millones de euros al Plan integral de listas de espera. De ellos, 27,4 millones corresponden a conciertos con entidades privadas. La mitad del gasto en reducir la lista de espera quirúrgica va a parar, por tanto, a los "medios ajenos". El año pasado, Sanidad presupuestó 58,7 millones de euros a este plan.
Más conciertos
- El peso de la asistencia concertada no ha hecho más que crecer en los últimos años, tal y como recogen las memorias anuales del Servicio Madrileño de salud. En 2007, el 9,6% de su presupuesto se destinaba a este concepto. Eran 620 millones de euros sobre un total de 6.377.
- En 2008 el porcentaje sube al 12,6% de los 6.954 millones de obligaciones reconocidas de la ejecución del presupuesto.
- En 2009 el peso de la concertada ya es del 16,1% para llegar al 17,3% en las últimas cuentas, de 2010.