16 de junio de 2010

Prohibir el burka

ABC

EDITORIALES

Prohibir el burka

Por razones sociológicas, muchas localidades catalanas son conscientes del problema que plantea la formación de guetos en los que se reproducen comportamientos impropios de una sociedad civilizada

Día 16/06/2010 - 03.57h


EL burka y otras prendas que impiden la identificación del rostro femenino son instrumentos de discriminación de la mujer y no peculiaridades culturales. Algunos sedicentes progresistas están atrapados en sus propias contradicciones en una materia que exige criterios firmes y voluntad política para defender el sentido común. Merecen por ello una valoración positiva los acuerdos adoptados por el Ayuntamiento de Barcelona y por otros municipios catalanes para prohibir el uso de estos velos integrales en los edificios de titularidad pública, y convendría también analizar la oportunidad de impedir su utilización con carácter general. Junto con razones evidentes de seguridad, esta prohibición deriva de las reglas más elementales del estado democrático, cuyo fundamento es el principio de igualdad plena entre el varón y la mujer.
Por razones sociológicas, muchas localidades catalanas son conscientes del problema que plantea la formación de guetos en los que se reproducen comportamientos impropios de una sociedad civilizada. Sin embargo, los partidos que integran el Ejecutivo presidido por José Montilla adoptan en esta materia una actitud incoherente y ambigua. Algunos incluso apoyan la prohibición en el ámbito local, pero rechazan —por razones puramente oportunistas— que se regule a nivel nacional. La proximidad de las elecciones autonómicas explica estas extrañas maniobras que pretenden diferenciar los mensajes ante una opinión pública que exige a los políticos actitudes rigurosas y coherentes. El llamado «multiculturalismo» ha demostrado ser una falacia que solo beneficia a ciertas minorías que desean mantener a la mujer en situación de inferioridad y sumisión. Los ayuntamientos que apuestan por la prohibición han dado un paso en la dirección correcta.