9 de febrero de 2010

«La bazofia que se escribe para niños y jóvenes les está idiotizando»

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ABC - Martes, 9 de Febrero de 2010

«La bazofia que se escribe para niños y jóvenes les está idiotizando»


ANTONIO ASTORGA

Cinéfago insomne, letraherido impenitente, Juan Manuel de Prada derrama unas imperecederas «Lágrimas en la lluvia» (Sial/Trivium) sobre cine y literatura. Imborrables.

-Como decía Azaña, la mejor manera de guardar un secreto es publicarlo en libro.

-¿Cuántos secretos guarda usted en «Lágrimas en la lluvia»?

-Muchos, porque ahí hay de alguna manera una selección de artículos en torno al cine y la literatura publicados en ABC y XL Semanal. De alguna manera hay una poética coherente, aunque también con sus excentricidades. Toda persona coherente tiene que ser excéntrica. Como uno.

-Y es un «cinéfago» insomne.

-Lo confieso. Desde niño he visto mucho cine, y sigo viéndolo. Me tiraba las noches de claro en claro, los sábados y los domingos, viendo películas, acostándome a las tres de la madrugada y levantándome a las siete.

-Y un letraherido impenitente.

-Sí, sí, realmente. Más allá de lo que supone el triunfo literario yo sobre todo lo que soy es una persona muy fanática de la lectura, desde niño.

-¿Cuándo aprendió a leer?

-Antes de tener uso de la memoria y de razón. Cuando fui al colegio con tres años yo ya sabía leer y escribir perfectamente. Esto ha marcado mi percepción del mundo y me convirtió en un niño precoz. Fui el bicho raro de la clase. Lo cual tiene sus desventajas, sobre todo amatorias: cosechas una profusa colección de calabazas con las chicas.

-¿Por qué ellas nunca se enamoraban de los listos o empollones de la clase y sí del guapo?

-Yo empollón no era, eso es una injuria. Por tener una visión muy literaria de la vida te convertías en un bicho raro. Y en esos momentos a las chicas les gusta el que corre o salta más. O el que en su subconsciente o inconsciente cumple mejor los requisitos del semental. Pero con los años los sementales se van quedando pachuchos, mientras que los que no hacíamos alarde ahí nos mantenemos.

-Sostiene que una de las especies más nefastas, divulgadas por la moderna pedagogía, es afirmar que «a tal o cual edad conviene leer tal o cual libro»

-Esto idiotiza a la gente y está creando remesas sucesivas de memos. Es mortal para la lectura. Que no solamente idiotiza las mentes infantiles y juveniles sino que les suministra pienso ideológico. Porque he descubierto que toda la bazofia que se está escribiendo para niños y jóvenes es una especie de compendio de los grandes hitos del Matrix progre. Te meten morcillonas repugnantes sobre la igualdad, y todos los rollos de ingeniería social. No es cosa española, sino mundial. La verdadera literatura es aquella que nos inquiere, nos zahiere, nos perturba y golpea.

-¿Ágatha le abrió el mundo?

-Christie fue mi primera lectura sistemática. Fui su lector compulsivo. Me subyugaba.

-¿Y Poe?

-Mi lectura fundacional. Es uno de los escritores que más me ha influido por su creación de atmósferas un tanto irreales, por su exploración de los aspectos más turbios de la psicología humana.

-¿El peor escritor del mundo?

-En «Lágrimas en la lluvia» hablo de algunos: Philip Roth, un autor sin alma para una época sin alma. Mi bestia negra, y zurrarle es tedioso.

-¿El paraíso para usted?

-Cuando he conseguido vivir de escribir, mi verdadera vocación sería vivir de leer, o de ver películas: irrealizable.

-¿Si le pido tres grandes directores de cine me respondería como Welles a Bogdanovitch...?

-...¡John Ford, John Ford y John Ford! Al igual que Cervantes, John Ford es un artista que está por encima de todos los demás, en conocimiento del alma, en capacidad para nombrar las pasiones más elementales, para alumbrar el misterio de la vida. Ford está por encima de todos los directores, lo cual no quiere decir que sin Ford no haya vida.