19 de febrero de 2010

El abuelo judío y de linaje español de Nicolas Sarkozy

EL PAIS

El abuelo judío y de linaje español de Nicolas Sarkozy


Sarkozy lanza el debate sobre la identidad nacional

J. P. QUIÑONERO | PARÍS

Publicado Viernes , 19-02-10 a las 13 : 01

El abuelo materno de Nicolas Sarkozy fue un judío de linaje español, cuya historia encarna las tribulaciones de una muy tradicional hostilidad francesa contra la inmigración, que también sufrió muy vivamente su padre, Pal Sarkozy.
Nuevas revelaciones sobre la historia familiar del presidente de la República [Nouvel Observateur, La vrai histoire de la famille Sarkozy] descubren un doloroso pasado íntimo, atormentado por la hostilidad administrativa de Francia contra inmigrantes que deseaban integrarse y eran rechazados por razones muy próximas a la xenofobia de Estado.
Benedict Mallah (1890-1972), el abuelo materno de Sarkozy, nació en Salónica, en el seno de una familia judía cuyos ancestros fueron expulsados de España en 1492. Los Mallah de Salónica tuvieron la «nacionalidad» española hasta que Grecia se anexionó Salónica en 1912. Durante mucho tiempo, los Mallah enviaban a sus hijos a España, hasta que algunos de ellos, como Benedicte, decidieron estudiar Medicina en Francia.
Médico, casado con Adèle Bouvier, gran burguesa, Benedict fue soldado durante la Gran guerra de 1914-1919 y decidió pedir la naturalización francesa, el 12 de febrero de 1924, por estos motivos: «Habiendo abandonado la idea de abandonar Francia, donde he fundado un hogar y resido desde 1905, tengo el honor de pedir la nacionalidad francesa...». El Prefecto de París rechazó esa demanda. La madre de Nicolas Sarkozy, Andrée, nació un año más tarde, cuando su padre, abuelo del futuro presidente de la República, todavía era un inmigrante cuya nacionalización había sido rechazada.
Benedict Mallah (1890-1972), el abuelo materno de Sarkozy, nació en Salónica, en el seno de una familia judía cuyos ancestros fueron expulsados de España en 1492
Décadas más tarde, Doan Bui e Isabelle Monnin publican en el semanario Nouvel Observateur las razones esgrimidas por el Prefecto de París para rechazar la nacionalidad al abuelo de Sarkozy, en 1924: «Aunque los informes recogidos sobre Benedicte Mallah no sean desfavorables, considero que no tiene títulos serios para apoyar su solicitud; de ahí que sea aconsejable aplazar su demanda y la de su esposa».

El debate sobre la identidad nacional
Por aquellos años, las cámaras de comercio francesas, los sindicatos y las asociaciones profesionales eran agresivamente hostiles contra los inmigrantes mejor calificados (médicos, abogados, profesiones liberales) que deseaban instalarse en Francia: se les negaban papeles, documentación, alegando «razones comerciales» para rechazar la naturalización.
Con el tiempo, Benedicte Mallah terminó consiguiendo la anhelada nacionalización. Pero el novio de su hija, Pal Sarkozy, inmigrante de origen húngaro, no solamente no quería ser francés: tuvo problemas para casarse con la madre del futuro presidente de la República, ya que su futuro yerno, antiguo inmigrante, deseaba nacionalizarlo, sin conseguirlo. Ni Pal Sarkozy deseaba ser francés, ni la Administración lo consideraba «presentable».
Cincuenta y cinco años más tarde, Nicolas Sarkozy decidió lanzar un gran debate sobre la identidad nacional, cuando la inmigración, de muy otra naturaleza, continúa planteando problemas de fondo a la misma o distinta sociedad francesa.