Un adolescente de 14 años se confiesa autor del incendio que causó 41 muertos en Israel
Un bombero participa en la extinción del fuego- AP
El joven asegura que se fumó una pipa y dejó las brasas en el bosque, lo que originó el fuego.-Las autoridades dan por extinguido el incendio tras cinco días de lucha contra las llamas
EL PAÍS / AGENCIAS / Jerusalén 06/12/2010
Un adolescente de 14 años ha reconocido hoy a la policía israelí que provocó sin quererlo el mayor incendio forestal registrado en Israel, que la pasada semana devastó el norte del país causando la muerte de 41 personas y que hasta ayer no se pudo dar por controlado.
Durante el interrogatorio al que le han sometido los agentes tras su arresto esta mañana, el chaval, cuya identidad no se ha revelado, ha admitido que se adentró el pasado jueves en el monte Carmelo a fumar una pipa de agua y que después tiró un trozo de carbón incandescente en una zona abierta en mitad del bosque, lo que originó las llamas y su rápida propagación, informa el diario israelíHaaretz. El adolescente ha añadido que le asustaron tanto las llamas que volvió corriendo al colegio sin avisar a nadie de la gravedad de la situación.
Tras el testimonio del adolescente, las autoridades israelíes han dejado en libertad a dos jóvenes drusos que permanecían detenidos tras sospecharse que habían sido los causantes de la catástrofe.
El incendio se inició el jueves y hasta esta mañana el cuerpo de bomberos y las unidades militares que hicieron frente a las llamas no han declarado prácticamente extinguidos los últimos focos. Además de causar 41 muertos, el fuego ha obligado a evacuar de sus hogares a 17.000 personas y ha desatado una tormenta política en Israel, con una oleada de críticas al Ejecutivo de Benjamín Netanyahu, al que se acusa de no estar preparado para afrontar catástrofes como la del monte Carmelo.
El fuego ha abrasado 5.000 hectáreas de gran valor ecológico, con cinco millones de árboles, según datos del Fondo Nacional Judío. El Ejecutivo israelí, ante la dimensión del fuego, se ha visto obligado a recurrir a la ayuda internacional. El Gobierno español ha colaborado con cuatro hidroaviones y otro aparato con equipo y material de ayuda que han operado desde la base aérea de Tel Nof, en el norte israelí. Una veintena de países han enviado ayuda aérea, equipos técnicos o dotaciones terrestres para participar en las labores de extinción.
