5 de marzo de 2009
Los distribuidores se oponen frontalmente al doblaje de más películas al catalán
EL PAIS - EFE - Barcelona - 05/03/2009
Los distribuidores se oponen frontalmente al doblaje de más películas al catalán
El presidente de FEDECINE, que agrupa al 90% del sector, ve "antieconómica" la medida que baraja la Generalitat
El presidente de la Federación de Distribuidores Cinematográficos (FEDICINE), Luis Hernández de Carlos, ha expresado hoy en declaraciones a Efe su frontal oposición al proyecto de Ley de Cine impulsado por la Generalitat y ha calificado de "inviable" la negociación. FEDICINE representa el 90% de la distribución española y agrupa a los representantes españoles de las principales majors (grandes productoras) estadounidenses, como Universal Pictures Internacional Spain y Walt Disney Studios.
Luis Hernández de Carlos ha asegurado que "no tiene sentido" pretender que la mitad de las películas extranjeras que se exhiban en los cines de Cataluña sean dobladas o subtituladas en catalán. En su opinión, "si aceptamos doblar al catalán, al día siguiente otros territorios reclamarán igual trato y en poco tiempo tendremos que traducir cada película a tres o cuatro lenguas".
"Que un país como España tenga que traducir las películas a tres o cuatro lenguas haría el negocio ingobernable y antieconómico", según Hernández de Carlos. El presidente de FEDICINE ha recordado que hace once años la Generalitat intentó imponer una medida semejante y chocó con la oposición radical de la mayor parte de los distribuidores españoles y las 'majors' norteamericanas. "Las razones válidas entonces son válidas ahora", ha sentenciado Hernández de Carlos, que cree que "la negociación es inviable" porque "no es un tema que podamos solucionar con contraprestaciones económicas, ya que el principal problema es que esta ley provocaría reacciones en cadena de otros territorios de España y Europa que no nos podemos permitir".
Rechazo a la confrontación
El presidente de FEDICINE ha añadido que la entidad que preside rechaza "la confrontación de orden político", por lo que hace once años llegó a un acuerdo con la Generalitat "para doblar voluntariamente algunas películas importantes y filmes infantiles". Por su parte, la Conselleria de Cultura de la Generalitat ha hecho público hoy otros apartados del proyecto de Ley de Cine.
Además de obligar al doblaje y subtitulación de la mitad de las películas en catalán, las bases de la citada ley prevén la creación de un fondo destinado a las salas privadas para fomentar la exhibición en catalán y el cine producido en Cataluña, especialmente el que se ruede en versión original catalana. Asimismo, el documento del Departamento de Cultura también establece la creación de una red pública de salas de cine, donde se proyectarán películas en versión original, preferiblemente europeas, y en catalán.
Estas medidas pretenden promover las obras en versión original y equilibrar la oferta de cine en catalán, según la Conselleria. El documento asegura que "el cine producido en Cataluña tiene grandes obstáculos para disfrutar de una distribución competitiva debido a la posición de dominio de las majors en el sector de la distribución, que dan prioridad a los productos producidos en Hollywood.
Los distribuidores se oponen frontalmente al doblaje de más películas al catalán
El presidente de FEDECINE, que agrupa al 90% del sector, ve "antieconómica" la medida que baraja la Generalitat
El presidente de la Federación de Distribuidores Cinematográficos (FEDICINE), Luis Hernández de Carlos, ha expresado hoy en declaraciones a Efe su frontal oposición al proyecto de Ley de Cine impulsado por la Generalitat y ha calificado de "inviable" la negociación. FEDICINE representa el 90% de la distribución española y agrupa a los representantes españoles de las principales majors (grandes productoras) estadounidenses, como Universal Pictures Internacional Spain y Walt Disney Studios.
Luis Hernández de Carlos ha asegurado que "no tiene sentido" pretender que la mitad de las películas extranjeras que se exhiban en los cines de Cataluña sean dobladas o subtituladas en catalán. En su opinión, "si aceptamos doblar al catalán, al día siguiente otros territorios reclamarán igual trato y en poco tiempo tendremos que traducir cada película a tres o cuatro lenguas".
"Que un país como España tenga que traducir las películas a tres o cuatro lenguas haría el negocio ingobernable y antieconómico", según Hernández de Carlos. El presidente de FEDICINE ha recordado que hace once años la Generalitat intentó imponer una medida semejante y chocó con la oposición radical de la mayor parte de los distribuidores españoles y las 'majors' norteamericanas. "Las razones válidas entonces son válidas ahora", ha sentenciado Hernández de Carlos, que cree que "la negociación es inviable" porque "no es un tema que podamos solucionar con contraprestaciones económicas, ya que el principal problema es que esta ley provocaría reacciones en cadena de otros territorios de España y Europa que no nos podemos permitir".
Rechazo a la confrontación
El presidente de FEDICINE ha añadido que la entidad que preside rechaza "la confrontación de orden político", por lo que hace once años llegó a un acuerdo con la Generalitat "para doblar voluntariamente algunas películas importantes y filmes infantiles". Por su parte, la Conselleria de Cultura de la Generalitat ha hecho público hoy otros apartados del proyecto de Ley de Cine.
Además de obligar al doblaje y subtitulación de la mitad de las películas en catalán, las bases de la citada ley prevén la creación de un fondo destinado a las salas privadas para fomentar la exhibición en catalán y el cine producido en Cataluña, especialmente el que se ruede en versión original catalana. Asimismo, el documento del Departamento de Cultura también establece la creación de una red pública de salas de cine, donde se proyectarán películas en versión original, preferiblemente europeas, y en catalán.
Estas medidas pretenden promover las obras en versión original y equilibrar la oferta de cine en catalán, según la Conselleria. El documento asegura que "el cine producido en Cataluña tiene grandes obstáculos para disfrutar de una distribución competitiva debido a la posición de dominio de las majors en el sector de la distribución, que dan prioridad a los productos producidos en Hollywood.