16 de febrero de 2015

Otra vez en defensa de los Judios

PROJECT SYNDICATE

 

Otra vez en defensa de los Judios


MADRID - A pesar de la impresión dada por los mítines masivos de unidad en toda Francia, el reciente ataque a la revista satírica Charlie Hebdo no significa que la libertad de expresión está bajo ninguna amenaza seria en Europa Occidental. Tampoco indica que el radicalismo islámico es de alguna manera a punto de engullir o transformar las sociedades occidentales. La amenaza de que lo hace destacar es una menos publicitada uno: el resurgimiento de la discriminación y la violencia contra los Judios de Europa.

Charlie Hebdo - el último vestigio de una tradición francesa del siglo XIX subida de tono y algo salvaje de caricatura indignante de figuras religiosas y políticas - bien puede ser un icono ideal de la libre expresión. Los europeos se levantaron para defender un principio vital; la libertad de expresión, sin embargo vicioso, conserva un lugar en cualquier democracia.

Del mismo modo, "Eurabia", la profecía de Bat Ye 'or de la fatalidad Islámica para Occidente, simplemente no está emergiendo. No hay partidos islámicos ocupan escaños en los parlamentos europeos; pocas figuras musulmanas principales cuentan en los principales centros de poder político y cultural de Europa; y las instituciones de la Unión Europea están prácticamente desprovistos de los árabes y los musulmanes.

Los esfuerzos de los radicales para reclutar y adoctrinar a los jóvenes musulmanes europeos no reflejan el aumento inexorable del islamista - o incluso islámica - influencia en Europa. Por el contrario, destacan la desesperación de los radicales de influir en una región donde la inmensa mayoría de los musulmanes aspiran a integrar en vez de desafío, el orden establecido.

Lo que es verdaderamente amenazada en Europa es su comunidad judía. En 2006, el Judio francés Ilan Halimi fue secuestrado y brutalmente torturado en un sótano durante tres semanas, lo que resulta en su muerte. En 2012, tres escolares judíos y un rabino fueron muertos a tiros en Toulouse. Y en abril pasado, una pareja de judíos en un suburbio parisino fueron robados, porque, como los atacantes pusieron, "Judios debe tener dinero" (aunque eso no explicaba por qué luego violaron a la mujer). Un mes más tarde, un yihadista francés atacó el museo judío en Bruselas, dejando tres muertos y un herido de gravedad. Unos meses después, una turba asaltó una sinagoga en París.

Ninguno de estos hechos provocó algo remotamente parecido a la indignación pública de las últimas semanas. Tenía el asesinato de cuatro Judios en un supermercado kosher en París, llevada a cabo por un cómplice del Charlie Hebdo atacantes antes de su captura, se produjo en otras circunstancias, se puede suponer que no habría generado un amplio movimiento para defender los valores de la República Francesa.
Algunos sostienen que el aumento de la violencia antisemita en Europa está motivado principalmente por la difícil situación de los palestinos. Pero, según un sondeo de 2012 , más los europeos creen que la violencia contra Judios se alimenta de larga data actitudes antisemitas, en lugar de un sentimiento anti-Israel.

El islamismo radical propaga el odio por Judios mucho antes el sionismo, y continuará haciéndolo después de la creación de un Estado palestino. Teniendo en cuenta esto, no es de extrañar que el aumento de la visibilidad del extremismo islamista tiene, capturando la atención de los jóvenes musulmanes frustrados en Europa y en otras partes, provocado un creciente violencia contra los Judios.

Pero el problema es más profundo, dando la impresión de que Judios no tienen futuro en Europa. Una reciente encuesta de YouGov encontró que una parte sustancial de las poblaciones francesas y británicas sostienen puntos de vista antisemitas. Otra encuesta , realizada por el Centro de Investigación sobre el prejuicio en la Universidad de Varsovia, mostró que, en 2013, alrededor del 63% de los polacos cree Judios conspiran para controlar el sistema bancario y los medios del mundo.

Esto tiene graves consecuencias no sólo para los Judios, sino para Europa en su conjunto. Como Hannah Arendt señaló hace seis décadas, el aumento del antisemitismo alimentada ascendencia de Europa en un totalitarismo. Con extrema derecha y los movimientos populistas ganando terreno en muchos países, el sistema político de Europa - y los valores que la sustentan - está en riesgo.

El primer ministro francés Manuel Valls reconoce este peligro. En un reciente discurso en la Asamblea Nacional, que recordó el ataque de Emile Zola en la "ciega estupidez" de Judio-odio hace casi 120 años, le preguntó : "¿Cómo podemos aceptar que en Francia ... gritos de" Muerte a los Judios "puede! ? ser escuchado en nuestras calles ... ¿Cómo podemos aceptar que los franceses pueden ser asesinados por ser judío "Luego advirtió que el renacimiento del antisemitismo en Francia - aparente, por ejemplo, en la ansiedad sobre la inclusión del Holocausto en el plan de estudios de la escuela francesa - indica una crisis de la democracia.

Pero Valls sigue siendo el único político europeo que han puesto de relieve el peligro con el sentido de urgencia que merece. Es hora de que sus contrapartes que intensifiquen, y al hacerlo no se deben descartar las políticas audaces, libres de cualquier complejo, destinadas a influir en la política de Israel hacia Palestina.

Al mismo tiempo, es una falacia peligrosa para buscar la redención para un problema que está tan profundamente arraigado en la historia de Europa - y en el Islam de - echándole la culpa sobre el conflicto Israel-Palestina o en jóvenes musulmanes alienados. Los europeos deben tomar una buena mirada a sí mismos si quieren evitar volver a caer en las garras del miedo, el odio, y la política espantosas.

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