4 de agosto de 2015

Iglesias digiere el fracaso de Tsipras y reconoce las «limitaciones» de Podemos

Iglesias digiere el fracaso de Tsipras y reconoce las «limitaciones» de Podemos

ABC - Día 04/08/2015 - 08.24h

«Lo que hizo el Gobierno griego es tristemente lo único que podía hacer (...) Una reforma de la Administración, defender la sanidad y la educación pública... no podemos hacer mucho más»

«¡Espera Alexis, que ya llegamos y vamos a ser más fuertes!» Jaleado por los aplausos de un público fiel en Vallecas, el pasado 11 de julio el secretario general de Podemos celebraba el resultado del referéndum griego y reivindicaba en pleno mitin unos vínculos con el partido hermano Syriza que abraza y suelta intermitentemente.
Iglesias sacó pecho entonces de la firmeza del primer ministro griego, Alexis Tsypras, y del órdago que había lanzado a Europa con la convocatoria del referéndum.
Pero en privado, y cuando el líder de Podemos no está haciendo política, reconoce las limitaciones de su partido y el poco margen de maniobra que tendrá en EuropaTal y como le ha ocurrido a Syriza. Es lo que sucedió el pasado 16 de julio, cuando en la presentación del libro de Manuel Castells «Redes de indignación y esperanza» se mostró menos contenido que delante de los focos. De hecho, él mismo señaló: «Estamos hablando de un libro, no es una rueda de prensa en la que hablamos en otros términos».
En aquella presentación, Iglesias fue preguntado por el hecho de que Tsipras, finalmente, hubiera tenido que aceptar las condiciones que le planteaba el Eurogrupo. Desde hacía ya unos días, evitaba la comparación con el partido del Gobierno heleno en ruedas de prensa. Entonces defendió a su compañero, aunque dejó entrever un mensaje bastante menos alentador que el que repite mitin tras mitin.
«Lo que hizo el Gobierno griego es tristemente lo único que podía hacer.Porque la alternativa que tenía, que podría haber sido preciosa, todos estamos de acuerdo en que implicaba salir de la Eurozona», aseguró el de Podemos. «Lo único que podemos hacer es acumular un poquito de poder administrativo para doblarles el brazo a los socialdemócratas y que giren», indicó.
«Cuando digo que Podemos triunfará si superamos al PSOE no estoy planteando un fin que sea precioso, no podemos hacer grandes cosas. Una reforma de la Administración, defender la sanidad y defender una educación pública... no podemos hacer mucho más», reconocía, apesadumbrado. Y fue aún más lejos: «Defender lo mismo que defendía la democracia cristiana hace treinta años».
Sí que marcó alguna diferencia, aunque no especialmente esperanzadora, con Grecia: «España [puede hacer] un poquito más que Grecia. Si nosotros ganamos, aquí los enemigos fundamentales no van a estar en el Eurogrupo. A las élites locales las vamos poder hacer llorar un poquito, mucho más que los griegos. Pero los límites son enormes».
Además, aprovechó para arremeter contra las instituciones europeas, a las que tachó de antidemocráticas por no respetar lo que el pueblo griego había votado en el referéndum. «El Gobierno griego creía que se iba a encontrar algo parecido a un sentimiento de respeto democrático en la Troika y en los países del Eurogrupo, y que si la mayor parte de los griegos decían 'apoyamos al Gobierno' iban a hacer más concesiones. Ynos hemos encontrado con que los señores que mandan en Europa son anti demócratas. Pero tienen medios suficientes para decir que los anti demócratas son los populistas. En la política cuenta el poder y un estado del sur de Europa tiene muy poquito poder», se lamentó.

No hay comentarios: